Jules Koundé está viviendo días complicados tras su costoso error en el empate del Barça ante el Celta de Vigo el pasado sábado. A pesar de ser uno de los jugadores más regulares y un fijo para Hansi Flick, su fallo puntual ha levantado críticas, especialmente por tratarse del segundo partido consecutivo en el que su rendimiento ha estado lejos de lo esperado.
En el club azulgrana reconocen que Koundé es una pieza clave en el esquema de Flick, pero también saben que su nombre sigue generando interés entre los grandes equipos de Europa. En este sentido, ha salido a la luz que el Arsenal de Mikel Arteta está seriamente interesado en hacerse con el francés en el mercado de invierno. Según fuentes internas, los londinenses estarían dispuestos a poner una oferta importante sobre la mesa para fichar al jugador, que consideran ideal para reforzar su línea defensiva.
El Barça enfrenta un dilema con esta posible operación. Por un lado, Koundé ha demostrado ser un líder en defensa y su polivalencia como central y lateral derecho lo hace indispensable en un equipo que necesita competitividad en cada línea. Pero por otro lado, el club sigue teniendo dificultades para cumplir con el fair play financiero, y una venta millonaria podría ayudar a equilibrar las cuentas. Aunque no hay cifras confirmadas, se habla de una oferta cercana a los 60 millones de euros, una cantidad que podría convencer a la directiva liderada por Deco y Joan Laporta.
Tras el partido en Balaídos, Koundé tuvo una conversación cara a cara con Flick. El técnico alemán le expresó su preocupación por la desconcentración que mostró en los últimos encuentros y le dejó claro que no puede permitirse errores de ese calibre en partidos decisivos. Por su parte, el francés asumió su responsabilidad y se comprometió con el entrenador a recuperar su mejor nivel.
Mientras tanto, en el vestuario confían en que Koundé pueda superar este bache y volver a ser el defensa sólido que destacó desde su llegada al Barça. Aunque el jugador está centrado en el proyecto de Flick, la sombra del Arsenal sigue presente, y cualquier decisión dependerá no solo de los deseos del futbolista, sino también de las necesidades económicas del club y de la capacidad de Flick para convencerlo de quedarse.
La pelota está en el tejado del Barça, que debe decidir si prioriza la estabilidad deportiva o se deja seducir por una oferta que aliviaría sus problemas financieros. Pero una cosa está clara: Jules Koundé sigue siendo uno de los activos más valiosos del equipo.