Mateu Alemany salió a afirmar que Jules Koundé estaba pensando en hacer las maletas, y abandonar el Barça. Aunque no dio muchos detalles, rápidamente comenzaron a aparecer los primeros rumores, que sugerían que no estaba contento con la demarcación que estaba ocupando. Xavi Hernández le garantizó que sería el central titular al lado de Ronald Araújo, pero ha tenido que aceptar ser lateral derecho, por la falta de efectivos en esa zona.
Y esto había provocado que se sintiera engañado por el entrenador de Terrassa, hasta el punto de plantearse hacer las maletas. Paris Saint-Germain, Liverpool, Bayern de Múnich, Inter de Milán o Manchester United aparecieron en escena, y no tardaron en interesarse en la contratación del internacional francés. Pero a través de sus redes sociales manifestó que no tenía pensado salir del Camp Nou, y que su compromiso con el proyecto era máximo.
El ex del Sevilla y del Girondins de Burdeos reconsideró su postura, y llegó a la conclusión de que lo mejor que podía hacer era quedarse. Se encuentra muy feliz con su vida en la ciudad condal, y no desea abandonar La Liga Santander bajo ningún concepto. No obstante, puede verse obligado a hacerlo, ahora que se ha filtrado que Joan Laporta sigue teniéndolo en la lista de transferibles, y puede ser uno de los sacrificios que realicen.
La necesidad de obtener ingresos en el Barça es desesperada, y viendo que piezas como Raphinha, Ferran Torres o Anssumane Fati se niegan a irse, han tenido que comenzar a pensar en alternativas. Y una de ellas es deshacerse de Koundé, por el cual pueden conseguir mucho dinero a cambio, ya que se especula que podría dejar cerca de 70 millones de euros en las arcas, una cifra considerablemente superior a la que costó hace tan solo 12 meses.
Para el defensa de 24 años sería un varapalo terrible tener que salir del proyecto de Xavi, pero puede verse obligado a ello. De lo contrario, no podrían registrar a las nuevas contrataciones que han llegado.
Koundé y Xavi, sin ‘feeling’
Xavi fue quien solicitó a Laporta el fichaje de Koundé, por el cual hicieron un esfuerzo muy importante. Pero no acaban de tener buena sintonía, aunque ambos desean seguir trabajando juntos. Sin embargo, el entrenador catalán entiende que puede no quedar de más remedio que echarlo.
Será la solución desesperada, en caso de que no consigan equilibrar las finanzas.