Takefusa Kubo jugará cedido durante una temporada en el Mallorca por el Real Madrid. El futbolista japonés de 18 años se estrenará en Primera División después de destacar en la pretemporada del club blanco, que ha preferido que siga su carrera en la máxima categoría del fútbol español en lugar de Segunda División B, donde milita su filial.
El nipón también contaba con una oferta del Valladolid de Ronaldo Nazario, pero finalmente vestirá la camiseta del Mallorca, equipo que entrena al técnico valenciano Vicente Moreno. "Estoy muy ilusionado y preparado para jugar (el domingo contra la Real Sociedad) aunque no depende de mí", ha asegurado en su llegada a las oficinas del club.
Un fichaje que trajo cola
Kubo llegó al club blanco este verano después de haber rechazado una oferta del Barça, que pretendía que se incorporara a su filial. La llegada del nipón al Santiago Bernabéu provocó mucha polémica, y es que Kubo es uno de los futbolistas que el la entidad blaugrana perdió por culpa de la sanción que la FIFA le aplicó en el año 2014 por el traspaso irregular de menores. A partir de aquel momento, el mediapunta siguió su carrera en su país natal -concretamente en el Tokyo FC- con el objetivo de volver a Barcelona en el momento en que fuera mayor de edad.
La secretaría técnica del Barça se pensaba que tenía el jugador controlado y confiaban en recuperarlo, pero sus pretensiones económicas y deportivas -quería ficha del primer equipo- provocaron que el jugador se escapara. Finalmente, el eterno rival demostró mucha más habilidad en los despachos y consiguió ficharlo. El Barça, inmediatamente después, respondió firmando a Hiroki Abe, un delantero nipón con menos talento pero que también había destacado en la Copa América con Japón.