Khvicha Kvaratskhelia está en el centro de las negociaciones que podrían acercarlo al FC Barcelona de cara a la próxima temporada. El extremo georgiano, que ha brillado con el Nápoles, es uno de los jugadores más deseados en Europa, y su nombre figura como prioridad en la agenda de Deco para reforzar el ataque azulgrana. Sin embargo, el fichaje no será sencillo, ya que el conjunto italiano busca blindar a su estrella mientras esta negocia los términos de su renovación.
El principal punto de fricción en las conversaciones entre Kvaratskhelia y el Nápoles radica en la inclusión de una cláusula de rescisión. Según fuentes cercanas a la negociación, el futbolista y su entorno desean que esta cláusula esté fijada en torno a los 70 millones de euros, una cifra que haría viable su traspaso al Barça. Sin embargo, el presidente del Nápoles, Aurelio De Laurentiis, es conocido por su dureza en este tipo de acuerdos y pretende que el valor de la cláusula supere los 100 millones.
La postura del Nápoles tiene sentido considerando el rendimiento de Kvaratskhelia desde su llegada al club. El georgiano ha sido una de las piezas clave en el ataque del equipo, destacando por su habilidad en el uno contra uno, su visión de juego y su capacidad goleadora. Estas cualidades no solo lo convierten en un jugador determinante para el conjunto italiano, sino también en una joya codiciada por los grandes de Europa.
Por su parte, el FC Barcelona, con Joan Laporta y Deco al mando, sigue trabajando para reforzar la plantilla a pesar de las limitaciones económicas. La idea de incorporar a Kvaratskhelia encaja perfectamente en el proyecto deportivo liderado por Flick, quien habría dado el visto bueno a la operación. En el Camp Nou confían en que una cláusula razonable pueda facilitar las negociaciones, y los 70 millones de euros que busca el entorno del jugador se perciben como un precio accesible para un talento de su calibre.
A pesar de las dificultades, en el Barça están dispuestos a esperar y monitorizar de cerca la situación. Kvaratskhelia está encantado con la posibilidad de recalar en el club catalán, ya que lo considera un escenario ideal para seguir creciendo y competir al más alto nivel. Sin embargo, el tiempo será clave, ya que el Nápoles no tiene prisa por cerrar la renovación y no cederá fácilmente en sus pretensiones.
Mientras tanto, otros clubes europeos, como el Manchester City o el United, también estarían atentos a la situación del georgiano, lo que podría complicar aún más las cosas para el Barça. La próxima ventana de fichajes promete ser crucial en el futuro de Kvaratskhelia.