Sin duda alguna, Lamine Yamal es una de las revoluciones de la presente temporada en el FC Barcelona, en la Liga y a nivel mundial. El joven crack derrocha calidad y ha generado una ilusión en can Barça parecida a la que provocaba Leo Messi. El futuro del club catalán pasa por sus botas.  

Lamine Yamal se convirtió el curso pasado en el jugador más joven de la historia del Barça que ha debutado con el primer equipo. Fue el pasado 29 de abril, en un partido contra el Real Betis en el Camp Nou. Lamine tenía 15 años, 9 meses y 16 días. 

Las lesiones convierten a Lamine Yamal en indiscutible 

Al principio se contaba con él como revulsivo. Un jugador de banquillo que serviría como recurso para agitar los partidos mientras iba madurando en el conjunto azulgrana.  

Lamine Yamal conduciendo el balón durante un partido del Barça / Foto: Europa Press

Sin embargo, las lesiones en el conjunto de Xavi Hernández le han convertido en un fijo de los onces titulares de Xavi durante el primer tramo de esta temporada. Ha disputado ya 15 partidos este curso. Y tales han sido sus actuaciones que en el Barça decidieron blindarlo. Renovó hasta 2026 con una cláusula de 1.000 millones de euros y un sueldo que ronda los 3 ‘kilos’. Un acuerdo que se revisará cuando el jugador cumpla la mayoría de edad. 

Lamine Yamal vuelve al banquillo 

Sin embargo, a medida que Xavi ha ido recuperando lesionados, Yamal ha pasado a un segundo plano. El joven extremo ha perdido protagonismo en los últimos partidos, volviendo a su papel de revulsivo. Un panorama que deja de asegurar su futuro en la capital catalana.  

Lamine Yamal entrenamiento Barça / Foto: EFE

Porque no son pocos los clubes que sueñan con sus servicios. Equipos como el Paris Saint-Germain o el Newcastle le tienen en su agenda y le aseguran la titularidad. Además, podrían esperar a que se acerque el final de su contrato actual para llevárselo sin poner ni euro en el traspaso. Si en la temporada y media que viene por delante Lamine no se consolida en el primer equipo, puede acabar siendo un problema (y una gran decepción) para el Barça