Con el mercado de verano a punto de abrirse, empiezan a circular rumores sobre posibles ventas en el FC Barcelona para cuadrar las cuentas. Uno de los nombres que ha sonado en las últimas semanas es el de Jules Koundé, que ha despertado el interés de grandes clubes europeos como el Arsenal. Sin embargo, dentro del vestuario hay voces que se oponen frontalmente a su salida, y una de las más firmes es la de Lamine Yamal.
Una conexión clave en la banda derecha
Lamine Yamal ha dejado claro tanto a nivel interno como en conversaciones informales que no quiere ni oír hablar de una venta de Koundé. El joven extremo y el defensa francés han formado una sociedad muy sólida en la banda derecha, entendiendo a la perfección los movimientos de cada uno y potenciando el juego ofensivo del equipo.

Para Lamine, Koundé no es solo un apoyo defensivo que le permite arriesgar en ataque; también es un compañero que interpreta a la perfección cuándo doblar, cuándo quedarse y cómo cubrirle las espaldas en momentos de riesgo. Su compenetración es total, y el extremo considera que perder a Koundé sería un retroceso importante para su propio crecimiento y para la estabilidad del equipo.
El Arsenal aprieta, pero el vestuario se posiciona
El Arsenal de Mikel Arteta ha mostrado un interés serio en Koundé, buscando reforzar su defensa de cara a la próxima temporada. El club inglés estaría dispuesto a poner sobre la mesa una oferta potente, que en otro contexto económico podría ser tentadora para el Barça.
Sin embargo, en el vestuario blaugrana hay consenso sobre la importancia de mantener a Koundé, y Lamine Yamal ha sido uno de los más claros en expresar esta postura. El joven canterano ha trasladado su deseo a los responsables deportivos y ha pedido a Joan Laporta y a Deco que no escuchen ofertas por un jugador que considera intocable.
Koundé, un pilar para el proyecto de Flick
Además del apoyo de sus compañeros, Hansi Flick también cuenta con Koundé en sus planes de futuro. El técnico alemán valora su polivalencia, su solvencia defensiva y su capacidad para adaptarse a diferentes esquemas tácticos. La idea de Flick es que Koundé siga siendo un hombre fundamental.

En este contexto, vender a Koundé no solo sería un golpe deportivo, sino también un movimiento que podría generar malestar interno, especialmente en jugadores jóvenes como Lamine Yamal, que ven en el francés un apoyo clave para seguir creciendo.
Un mensaje claro para Laporta
El mensaje de Lamine Yamal es rotundo: Koundé no se toca. El joven crack sabe que el Barça necesita estabilidad en esta nueva etapa con Flick al mando, y considera que mantener a jugadores de nivel contrastado como Koundé es fundamental para aspirar a los grandes títulos.
Ahora, la pelota está en el tejado de Joan Laporta y la dirección deportiva, que deberán gestionar las ofertas que lleguen sin romper el equilibrio de un vestuario que empieza a ilusionarse con el nuevo proyecto.