El mundo del fútbol es caprichoso a más no poder. Cuando llega el final de temporada, todos los clubes tienen cosas a gestionar. Para los que han sido más exitosos, como Real Madrid y Liverpool, este fin de semana ha sido el de la final de la Champions que se acabaron llevando los blancos tras el gol de Vinícius Jr.
Messi, protagonista involuntario
Una final que el resto de equipos tuvieron que ver desde sus casas. Uno de ellos fue el PSG, una de las víctimas del Real Madrid en su camino a la final. Los parisinos, cuando comenzó la temporada, eran claros favoritos a jugar la final en su casa, y el proyecto que lideran Mbappé, Neymar y Messi se ha quedado muy lejos de las expectativas.
El argentino fue la guinda de un pastel que ya de por sí tenía muy buena pinta, y el propio Messi aseguró que si fichó por el PSG fue para ganar la Champions. No obstante, no ha conseguido hacerlo en el primer año, y por caprichos del calendario, mientras casi todos los ojos apuntaban a París para la final, el argentino era objeto de mofa en las redes sociales.
Porque el PSG ha aprovechado para promocionar una gira que harán en la pretemporada por Japón para enfrentarse a tres equipos del país nipón. En uno de los vídeos promocionales aparece el tridente Mbappé-Neymar-Messi, el francés pronuncia algunas frases en japonés, el brasileño se atreve con el inglés, pero Messi solo habla en español.
Mbappé, en japonés; Neymar, en inglés; y Messi, en rosarino
Y lo hace de una forma bastante impostada, casi dudando de cada palabra que pronuncia. No ha sido la mejor aparición de Messi en un vídeo promocional, y las redes sociales no perdonan. "Idiomas de Mbappé y Neymar: inglés y japonés. Idioma de Messi: ROSARINO", decía un usuario de Twitter.
"Por favor Messi cag***óse en formas, protocolos, contratos, acuerdos y hablando en rosarino sin importarle. Qué hombre", reflejaba otro. Sea como sea, Messi siempre ha demostrado que, aunque sea parte de su trabajo, el hecho de ponerse frente a una cámara no es lo suyo.
El mejor jugador de la historia fue a París para ganar títulos, concretamente uno, la Champions League, y de momento, en su primera temporada, no lo ha conseguido. Volverá a intentarlo la temporada que viene, y volverá a hacerlo con Mbappé a su lado, aunque ya con el francés como estrella indiscutible del equipo.