Los últimos días han sido una auténtica montaña rusa de emociones para Leo Messi. De tener que decir adiós al Barça de mala gana y haciendo una rueda de prensa en la cual se desmontó, ha pasado a ser el reclamo de masas en su nueva ciudad.
Messimanía en París
En París ha habido euforia desde el mismo momento en el que se despedía del Barça. Cuando todavía no era ni mucho menos futbolista del Paris Saint-Germain, el aeropuerto de París-Le Bourget ya congregaba a aficionados del conjunto parisino esperando al argentino. Y después llegó el momento del vuelo y del primer baño de masas. Messi se vio sorprendido al ver tanta expectación, que siguió presente durante toda la jornada de ayer.
Y si el martes fue un día de emociones fuertes para Messi, este miércoles, con la presentación oficial, también lo ha sido. Dentro del Parque de los Príncipes ha hecho la rueda de prensa, y fuera esperaban los seguidores del PSG con gritos de "Messi, Messi", bengalas y humo. Locura absoluta por Messi.
Pero es que esto no ha sido todo, ya que en París hay un nuevo ídolo. Nada de Neymar Jr ni de Kylian Mbappé, ahora la figura es Leo Messi. Y donde ya ha generado el primer caos es en las tiendas del PSG. Durante las últimas horas sólo se han hecho que ventas de camisetas de Messi con el dorsal 30.
Imágenes de largas colas, de fans ansiosos y de personas y más personas con la camiseta de su nuevo héroe. Las instantáneas que han dejado las tiendas del PSG han sido brutales.
Trauma en Barcelona
Pero si en París ha hecho furor Messi y su camiseta ya es un éxito absoluto de ventas, en Barcelona la situación es bien diferente. Si durante el verano la camiseta del Barça de Messi se vendió sin problemas, ahora ya han empezado a perder el ritmo. Y en los próximos meses las ventas de camisetas blaugrana caerán en picado.
Según varios estudios, hasta ahora la venta de camisetas del Barça con el nombre de Messi y el dorsal 10 suponían un 80% del total. Al final de año, los ingresos de las ventas —sólo de camisetas de Messi— ascendían a los 20-30 millones de euros. Ahora, sin embargo, sin el argentino, costará aún más salir de la grave crisis económica en la cual está inmerso el club culé.
Se espera que Memphis Depay, la apuesta actual con la marcha de Messi, pueda ser el gran reclamo del Barça a nivel de merchandising. El especialista económico Marc Ciria apunta a EFE que "podría llegar a vender 5 de cada 10 camisetas y así evitar que la caída de las ventas fuese más allá del 30% a corto plazo".
El Barça se hunde aún más a nivel económico sin la marca Messi. Se calcula que el club blaugrana podría dejar de ingresar, en total, hasta 137 millones al año por la marcha de su futbolista más icónico.