Leroy Sané es otra estrella del Bayern de Múnich que se plantea hacer las maletas, como sucede con Jamal Musiala, con Alphonso Davies, con Serge Gnabry o con Joshua Kimmich. Pero en su caso, sí que está siendo titular indiscutible, y ha recuperado su mejor versión de la mano de Thomas Tuchel. Precisamente, la salida del entrenador a final de temporada es la razón por la cual estudia un cambio de aires, y ha decidido paralizar su renovación.
Todo estaba pactado con la directiva bávara, y había llegado a un acuerdo para ampliar su vínculo, el cual expira en poco más de 12 meses. Pero después de que se confirmara la despedida del mánager germano, ha cambiado de opinión, y ha comenzado a valorar las propuestas que tiene sobre la mesa, que no son pocas. Una cosa entendible, viendo que está firmando un curso simplemente espectacular, y ha acabado con las dudas que había en torno a su figura.
Se ha erigido en el mejor socio posible para Harry Kane, y los nueve goles y las 12 asistencias que ha conseguido entre todas las competiciones son unas cifras sensacionales. Ha disputado prácticamente todos los minutos, y por fin ha demostrado que puede ser uno de los mejores del planeta. Porque hasta el momento, no había sido capaz de encajar en el Allianz Arena, donde aterrizó en verano de 2020, procedente del Manchester City de Pep Guardiola.
En caso de que finalmente quiera abandonar la Bundesliga, a Sané no le faltarán llamadas, y ha sido colocado en el Liverpool o en el Chelsea. Pero ahora se ha filtrado que está en conversaciones con Deco, y que valora positivamente la idea de conocer una nueva competición, como es La Liga EA Sports, y recalar en el Barça. Allí, podría completar el tridente ofensivo, y compartir de nuevo el ataque con Robert Lewandowski, además de Lamine Yamal.
El ariete polaco, junto a Ilkay Gündogan y Marc-André ter Stegen, harán todo lo posible para convencer a su compatriota, y que acabe aterrizando en el Camp Nou.
Joan Laporta, consciente de la dificultad que implica el fichaje de Sané
Pero ahora mismo es complicado ser optimista con el fichaje de Sané, que tiene un valor de mercado de 80 millones de euros, y por el cual el Bayern solicitará mucho dinero. Aunque puede ser más sencillo con la entrada de Ronald Araújo en las negociaciones.
El uruguayo es una prioridad para la entidad germana, y en el Barça ya no es intocable, después de la irrupción de Pau Cubarsí, que está aportando mucha más seguridad que el ‘4’.