El FC Barcelona logró el pase a semifinales de la Champions League, pero lo hizo dejando una imagen muy alejada de lo que se espera de un equipo que aspira a ganarla. A pesar del 4-0 en la ida, la derrota por 3-1 en Dortmund encendió las alarmas dentro del vestuario culé, donde los pesos pesados han empezado a sacar conclusiones preocupantes de cara a lo que se viene.

El partido en el Signal Iduna Park fue un auténtico toque de atención. El Barça fue superado en muchas fases del encuentro por un Borussia Dortmund valiente, intenso y ambicioso, que puso contra las cuerdas a los de Hansi Flick. Y aunque la clasificación quedó asegurada gracias al cómodo resultado del primer encuentro, en el vestuario no gustó nada la imagen ofrecida en Alemania.

Ronald Araujo i Lewandowski, decebuts durant el Barça - Betis / Foto: EFE
Ronald Araujo i Lewandowski, decebuts durant el Barça - Betis / Foto: EFE

Araujo, señalado por el grupo

Uno de los nombres que más ha quedado en entredicho tras la vuelta de cuartos ha sido el de Ronald Araujo. El central uruguayo, que no ha conseguido recuperar su mejor versión esta temporada, volvió a cometer errores graves que comprometieron al equipo. Mal en la salida de balón, lento en los duelos y desubicado en las coberturas, su actuación ha provocado un consenso inesperado en el grupo.

Varios líderes del equipo habrían trasladado a Flick su preocupación por el rendimiento del defensa. Para ellos, en los partidos grandes ya no es una opción fiable, y creen que el técnico alemán debe apostar por la pareja que más garantías ofrece ahora mismo: Íñigo Martínez y Pau Cubarsí.

Iñigo y Cubarsí, la dupla que convence

La combinación entre la experiencia de Íñigo y la irrupción brillante de Cubarsí ha convencido tanto a Flick como al vestuario. Ambos se entienden bien, ofrecen seguridad en salida y tienen una compenetración que Araujo no ha sabido consolidar con ninguno de sus compañeros este curso.

Cubarsí ha sorprendido por su madurez a pesar de su juventud, mientras que Íñigo, cuando ha estado sano, ha demostrado ser el más sólido del equipo en defensa. En los entrenamientos, el cuerpo técnico ya trabaja con esta dupla como la preferida de cara a las semifinales, donde tocará medirse a rivales de mucha más entidad.

Respeto personal, pero decisiones necesarias

Nadie duda de la calidad ni del compromiso de Araujo, pero el nivel que exige la Champions no permite más concesiones. Dentro del vestuario existe respeto hacia él, pero muchos consideran que insistir con su titularidad puede acabar costando caro.

Ronald Araujo, durant un entrenament del Barça / Foto: FC Barcelona
Ronald Araujo, durant un entrenament del Barça / Foto: FC Barcelona

La presión ha llegado a Flick, que ya dejó entrever tras el partido que habrá ajustes tácticos y de nombres en las próximas citas. Aunque no quiso personalizar, el mensaje va dirigido claramente a ciertas posiciones donde se están produciendo fallos recurrentes.

Un aviso a tiempo

El Barça ya está entre los cuatro mejores de Europa, pero lo vivido en Dortmund ha servido como recordatorio: los errores se pagan caros. Y con equipos como el Inter de Milán o el Bayern al acecho, el margen de error es mínimo. El vestuario lo sabe, y Flick también.

Por eso, el mensaje ha sido claro. En el vestuario no quieren ver más a Araujo como titular en los partidos grandes. No es personal, es fútbol de élite. Y en esta fase, los sentimientos se aparcan. Lo importante es no volver a repetir los errores de Dortmund... porque la próxima vez, puede no haber margen de maniobra.