Robert Lewandowski está viviendo en sus carnes los mismos males que ya le tocaron sufrir en su día a Leo Messi. El delantero polaco está rindiendo a un nivel espectacular, pero aún y así da la sensación de que no es suficiente para que el Barça sea todo lo competitivo que debería. El gran problema es la tremenda dependencia goleadora que tiene el equipo blaugrana de Lewandowski, que con 12 goles ha marcado el 50% de los tantos del equipo. Y es que entre el resto de jugadores son han sido capaces de anotar 12 goles más.

Este hecho provoca un grave problema que se vio en Múnich y en Milán. Contra el Bayern, Lewandowski no estuvo acertado, algo extraño en él. Contra el Inter, el delantero pudo ser anulado por la férrea defensa italiana. En estas circunstancias, y en un equipo de la entidad del Barça, lo normal es que otros actores hubieran asumido el papel goleador, aprovechando que todas las miradas estaban puestas en Lewandowski, pero no fue así.

Ousmane Dembélé no está manteniendo sus grandes números de la pretemporada / Foto: Europa Press

Lewandowski, solo ante el gol

Y es que el papel del resto de delanteros del Barça está siendo muy pobre, testimonial. Dembélé y Ansu Fati solo han marcado 2 goles cada uno, mientras que Ferran Torres, Memphis Depay y Raphinha apenas han sudo capaces de ver portería en una ocasión. Con estas estadísticas, o Lewandowski termina la temporada con unas cifras totalmente escandalosas, o al Barça no le llegará para poder luchar por la Liga, y mucho menos por la Champions League.

Leo Messi ya vivió esta situación en sus últimos años en el Barça, en la que la dependencia en la pólvora del argentino era abusiva, hasta el punto de verse señalado en los partidos en los que demostraba ser más mortal de lo que se creía. Las defensas rivales tenía suficiente con anularlo a él para anular a todo el Barça. Ahora le está tocando sufrir lo mismo a Lewandowski, que no se está viendo acompañado por sus compañeros ofensivos.

El Barça nota a faltar los goles de Aubameyang / Foto: EFE

Aubameyang, el plan B ideal

En este sentido, es posible que el Barça esté acusando demasiado la salida de Aubameyang, que tuvo que irse del club para dar cabida salarial a todos los fichajes. La idea del Barça era lograr la salida de Memphis Depay, pero la negativa del neerlandés obligó a activar la salida de Aubameyang en dirección al Chelsea. El gabonés era una garantía de gol y un seguro para cubrirle las espaldas a Lewandowski.

Ahora ya no hay marcha atrás, por lo que Dembélé, Raphinha, Ansu Fati, Ferran Torres y Memphis Depay deben asumir su parte de responsabilidad goleadora. Y es que de ellos depende gran parte de las opciones de firmar una gran temporada o, de lo contrario, completar otro año más de transición sin títulos nuevos que añadir al museo del Barça.