Lucy Bronze, exfutbolista Barça y actual jugadora del Chelsea, fue diagnosticada durante 2021 de autismo y TDAH: "Era una cosa que siempre supe, de alguna manera", ha empezado la inglesa. Y es que en una entrevista concedida a la exfutbolista Alex Scott para la BBC, la internacional inglesa ha hablado por primera vez de manera pública sobre cómo se ha sentido siempre con respecto a sí misma y a sus relaciones con las compañeras de equipo.

Lucy Bronze: "Mi madre me había hablado desde bien pequeña y notaba ciertas cosas en mí"

La futbolista de 33 años ha revelado sus dificultades a la hora de abordar situaciones cotidianas, ya no en un campo de fútbol, sino en su día a día: "Abrazar a la gente, mantener el contacto visual cuando hablas, estas dos cosas las tuve que aprender porque se ven como la norma, y me resultaron muy difícil".

Lucy Bronze tuvo que, con el tiempo, resolver sus batallas internas, y es que "mi madre me había hablado desde bien pequeña y notaba ciertas cosas en mí". De hecho, uno de los recursos que trató de implementar en su conducta con tal de enmascarar su autismo fue el de "imitar" la manera de comunicarse de algunas compañeras.

Todo, recordando emotivamente su primera concentración con Inglaterra, ya que confiesa que "cuando me incorporé a Inglaterra no podía hablar con nadie". En este contexto, revela una anécdota con Casey Stoney: "Me dijo: 'No me has mirado nunca a los ojos cuando me hablas', y yo le dije: 'No es por ti, es por mí'. Me fijaba en Jill (Scott) y como habla a la gente. Pensé en imitarla un poco. Ahora lo hago mejor, pero a veces me siento un poco incómoda.

"Todas las cosas que tengo a causa del autismo han jugado a mi favor"

Lucy Bronze no solo ha conseguido aceptar con el paso de los años su condición, sino que ha aprendido a vivir con ella e, incluso, valorarla. Primeramente, sobre mirar a los ojos y abrazar, explica que "antes era frustrante porque sentía que lo tenía que hacer para que los otros se sintieran cómodos, pero a mí me hacía sentir más incómoda". Con todo, ahora Lucy Bronze cataloga su condición como "mi superpoder". El caso es que la defensa del Chelsea indica que "una cosa que es realmente buena para el TDAH y el autismo es el ejercicio. Tener esta concentración, algo que hacer, mantenerse en movimiento. Entrenar cada día es increíble para mí.

Lucy Bronze / Foto: Europa Press
Lucy Bronze / Foto: Europa Press

Algunas de las otras chicas dirán: 'Seguro que tienes 33 años porque no paras...' Todas las cosas que tengo a causa del autismo han jugado a mi favor. No sé si diría que soy apasionada (por el fútbol), estoy obsesionada. Es mi autismo, mi hiperfocalización en el fútbol", cierra.