Luis Enrique es el primero que no lo dudó a la hora de confiar en Anssumane Fati y de incluirlo en sus convocatorias. Pese a que todavía no estaba recuperado, quiso llevárselo a la concentración para que se integrara poco a poco en el equipo, y estuvo en el banquillo en las primeras cuatro jornadas de la UEFA Nations League. Por esa razón, su ausencia en la última lista dio mucho de qué hablar, y provocó que haya serias dudas sobre su presencia en el Mundial de Qatar.
Está claro que algo pasa con la estrella del Barça, y que no quieren explicar. Si ‘Lucho’, que es su mayor fan, no se lo llevó a ‘la Roja’ es porque realmente no le ve al 100%, por mucho que Xavi Hernández insista en que lo único que necesita es rodaje y tener nuevamente ritmo competitivo. Pero tampoco ayuda el hecho de que su papel sea completamente secundario en el conjunto azulgrana, como se ha podido ver durante este curso.
Tan solo ha aparecido en el once inicial en un par de ocasiones, y aunque ha dejado muestras de su inmensa calidad y su potencial, todavía está lejos de su mejor versión. Necesita volver a ser ese extremo desequilibrante, veloz, potente y con una increíble facilidad para ver portería. Precisamente, esto último es lo que está intentando recuperar primero, pues se está mostrando demasiado nervioso e impreciso en los metros finales.
En el Camp Nou son optimistas con ‘Ansu’, pues no hay que olvidar que sigue siendo insultantemente joven, y todavía no ha cumplido los 20 años. Pero es evidente que las graves lesiones y las constantes recaídas que ha sufrido en las últimas dos campañas han mermado su confianza, y han provocado que su rendimiento decaiga. Es una cosa completamente normal y entendible, no obstante, no le servirá de excusa durante mucho tiempo.
Porque ya hace meses que está rehabilitado, y por eso los esfuerzos de Fati se centran en volver a ser el crack que era antes de la lesión. Joan Laporta y Mateu Alemany cruzan los dedos para que sea capaz de imponerse, y en el Barça también esperan que llegue a convertirse en la estrella mundial que prometía ser en sus inicios.
Luis Enrique no se lo llevará a Qatar si sigue así
Ansu tiene un mes decisivo para dar un golpe sobre la mesa y conseguir imponerse. Su futuro está en juego, y el primer reto que debe de despertar la motivación del hispano-guineano es su presencia en el Mundial. Porque en caso de seguir en el banquillo del Barça, Luis Enrique ha advertido que no lo convocará.
Sería una decisión mediática, pero bastante razonable.