Luis Enrique puede ser confirmado como el nuevo entrenador del Paris Saint-Germain en los próximos días. De momento, se mantiene a la espera de que se anuncie la destitución de Christophe Galtier, quien está sentenciado totalmente desde hace mucho tiempo. Concretamente, después de que cayeran eliminados en octavos de final de la Champions League contra el Bayern de Múnich, cuando cavó su propia tumba. Además, los resultados en la recta final de la temporada no fueron buenos.
Y el técnico galo no supo gestionar el vestuario, como le pasó a sus predecesores. Nasser Al-Khelaïfi busca a un líder con personalidad y carácter para gestionar la plantilla, y se ha decantado por ‘Lucho’. El acuerdo es total, y solo falta el anuncio oficial. De hecho, ya han comenzado a preparar la planificación de cara a la próxima campaña, y el asturiano se ha atrevido a realizar una primera petición: el fichaje de Jules Koundé.
Una de las zonas a reforzar es la retaguardia, posición en la cual han perdido a Sergio Ramos, y el exentrenador del Celta de Vigo o de la AS Roma ha pensado en la estrella del Barça. Sabe perfectamente que no está contento allí por culpa de Xavi Hernández, ya que considera que le engañaron cuando firmó. Le prometieron que jugaría como central, pero la realidad ha sido muy distinta, y se ha visto obligado a actuar como lateral derecho.
El internacional francés ha avisado que no quiere jugar en la banda, y en caso de que en el Camp Nou no le garanticen que las cosas cambiarán, estudiará sus opciones. El propio Mateu Alemany confirmó públicamente que el crack de 24 años había solicitado que le dejaran salir, y no tardó en ser colocado en la órbita de conjuntos de la Premier League como el Chelsea, el Manchester United o el Liverpool. Y el PSG ahora también está en la subasta.
Han pensado en Koundé como un refuerzo excelso, y Luis Enrique no ha tenido ningún tipo de duda antes de pedir a Al-Khelaïfi que intente sacarlo de La Liga Santander.
Koundé, ¿de regreso a su país natal?
Para convencer a Koundé, el PSG le garantiza jugar junto a Marquinhos en el eje de la defensa, además de percibir un salario más elevado de los seis ‘kilos’ netos que cobra actualmente, y formar parte de un proyecto ambicioso que compite por todos los títulos. Y podría regresar a su país natal, el cual abandonó en 2019 para unirse al Sevilla.
El Barça no se conformará con menos de 75 millones de euros, así que Al-Khelaïfi sabe que no será barato.