A menos de ocho meses para que arranque el Mundial de Qatar, la selección española ya conoce a los rivales a quien se tendrá que enfrentar en la fase de grupos. Este sorteo no es la única cosa propia de la víspera de una gran competición internacional, sino que también es frecuente que se hable de las posibles convocatorias de los diferentes países.
En el caso de España, es un ejemplo el caso de Mikel Oyarzabal, futbolista que sufrió una grave lesión durante el mes de marzo y que peligra su presencia en los revolucionarios estadios de Qatar en noviembre. El mismo tipo de conversación hay en torno al nombre de Gerard Piqué, pero todo nace de una vertiente muy diferente y tiene una resolución más complicada.
Gerard Piqué abre la puerta de retorno a la selección española
El central barcelonés renunció a jugar más partidos con la selección española en el año 2018 alegando que "necesitaba un descanso". Ahora, a sus 35 años, se siente en un gran estado de forma y se ve con suficiente confianza para regresar a la selección gracias al buen momento de forma que atraviesa bajo las órdenes de Xavi Hernández en el Barça.
Además, el propio Piqué ha confesado públicamente que nunca quiere descartar una opción y hay que tener en cuenta que, en el caso de volver a jugar con la Roja, muy probablemente sería su última gran competición internacional, ya que en la Eurocopa de 2024 ya tendría 37 años y durante el próximo Mundial, 39.
No todo el mundo vería con buenos ojos que Piqué regresara
Sea como sea, la figura de Gerard Piqué es siempre de las más polémicas. El central catalán aprovecha muchas ocasiones para manifestar su opinión y la mayoría de veces ha sido manifestando su barcelonismo o cargando contra aficiones como la del Real Madrid o la del Espanyol. De añadida, en la Real Federación Española de Fútbol el nombre del defensa blaugrana no es grato y se considera que en el combinado nacional hay alternativas suficientes para el eje de la zaga como para tener que volver a convocar al que un día se retiró del equipo.
Con todo, la decisión final es única y exclusivamente de Luis Enrique y un entrenador que no escucha voces ajenas y que no elude la controversia es precisamente el asturiano. Habrá que esperar, pero conociendo el perfil de ambos protagonistas, la presencia de Gerard Piqué en el Mundial del Qatar es más que probable.