Luis de la Fuente no ha dirigido todavía su primer partido con la selección española y ya tiene el primer gran incendio encima de la mesa. Y es que esperaba que Sergio Ramos fuera anunciar ahora su retirada de la Roja, y mucho menos que lo fuera a hacer de forma unilateral y atacando con dureza al nuevo seleccionador. "El seleccionador me ha comunicado que no cuenta y que no va a contar conmigo, independientemente del nivel que pueda mostrar [...]. Creo que esa trayectoria merecía terminar por una decisión personal o porque mi rendimiento no estuviera a la altura de lo que merece nuestra Selección, pero no por cuestión de la edad u otras razones que, sin haberlas oído, he sentido", ha explicado Ramos a través de un comunicado.
La noticia cayó como un jarro de agua fría en la RFEF, pues desde hacía tiempo se trabajaba en la idea de que Sergio Ramos, emblema de la selección española campeona de todo, se fuera por la puerta grande, como una leyenda, y no como ha terminado yéndose. Además, a nadie se le escapa de que Luis de la Fuente ya empieza mal con una selección siempre rodeada de demasiado ruido mediático.
Llamada subida de tono
Tal y como explica este viernes Ok Diario, todo se desencadenó en una llamada de Luis de la Fuente a Sergio Ramos. El seleccionador, que conoce al central de su etapa conjunta en el Sevilla, había recibido varios mensajes del jugador en referencia a su posible retorno a la selección. Sin Luis Enrique en el banquillo y rindiendo a un gran nivel con el París Saint-Germain, Ramos estaba convencido de que iba a tener una nueva oportunidad de volver a la selección, por lo que, acercándose ya el momento de la primera convocatoria, decidió apretar a Luis de la Fuente. El seleccionador, por su parte, no consideraba que ahora fuera el mejor momento de llamar a Ramos, pues focalizaría en él el nuevo proyecto, y al ver que el jugador seguía enviándole mensajes, tomó la decisión de decírselo personalmente.
La llamada, sin embargo, no fue cómo imaginaba el seleccionador. Sergio Ramos no se tomó nada bien el mensaje de De la Fuente y la conversación fue subiendo de tono, hasta el punto de que el entrenador decidió cortar por lo sano, viendo que todo podía terminar de la peor manera posible. Lo que De la Fuente, no nadie, esperaba, es que Sergio Ramos fuera a anunciar poco después de que se retiraba definitivamente de la Roja.
Mensajes contradictorios
Ahora falta por ver quién de los dos no dice la verdad. Luis de la Fuente mantiene que no le había dicho a Sergio Ramos que no fuera a volver nunca más con él, sino que ahora no era el momento. El jugador, en cambio, asegura en su comunicado que De la Fuente no tenía la intención de llamarle más, motivo por el cual ha decidido retirarse de la selección española. A ello se ha referido también René Ramos, hermano y representante del jugador. "No era cuestión de ir o no ir ahora, era cuestión de poder mantener la ilusión de volver. Porque esa ilusión no se la pueden quitar a nadie con justicia y menos a ti, que por hambre, ganas y rendimiento, al menos en mi opinión, merecías estar”, ha escrito en Twitter.
Sea como fuera, lo cierto es que Sergio Ramos no se tomó nada bien las duras palabras que le transmitió Luis de la Fuente, hasta poner el punto y final a su sueño de volver a vestir algún día la camiseta de la selección española.