Más de dos meses después de los hechos, la investigación a Luis Rubiales por el beso no consentido a Jennifer Hermoso en la celebración del Mundial femenino sigue en curso. Esta semana se abre una nueva ronda de testificales con el entrenador de la selección española masculina, Luis de la Fuente, y el exjefe de comunicación de la RFEF, Pablo García Cuervo.
El juez de la Audiencia Nacional Francisco de Jorge ha programado esta ronda de testificales durante el próximo mes de noviembre después de haber recabado los testimonios de los cuatro investigados: el propio Rubiales, el exseleccionador femenino Jorge Vilda, el director de la selección masculina, Albert Luque, y el director de Marketing de la Real Federación Española de Fútbol, Rubén Rivera. Este nuevo proceso empezará el próximo jueves.
Luis de la Fuente, citado el jueves
Es en esta fecha cuando está citado el seleccionador masculino. No será el único, ya que también le acompañarán García Cuervo, destituido de su puesto de director de comunicación de la RFEF el pasado 29 de septiembre, y el subdirector de comunicación, Enrique Yunta.
El próximo 14 de noviembre están citados otros miembros de la Federación. José María Timón, director de gabinete de Rubiales, Javier López Vallejo, psicólogo de la selección femenina, y Javier Puyol, responsable de cumplimiento normativo de la RFEF, deberán prestar declaración. También tendrán que hacerlo la jugadora del Arsenal y de la selección, Laia Codina, y el presidente del Comité Nacional del Fútbol Femenino, Rafael del Amo.
El 30 de noviembre, fecha límite
Todos los protagonistas mencionados prestarán declaración sobre los dos posibles hechos que se investigan: el consentimiento en el beso de Rubiales a Jennifer Hermoso tras la final del Mundial, y las presiones que la jugadora denuncia haber sufrido por parte del expresidente de la Federación y de su círculo más cercano.
La ronda de declaraciones programada hasta ahora tendrá su fecha límite el 30 de noviembre, cuando se produzca un careo entre el director de marketing de la RFEF, Rubén Rivero, y una amiga de Hermoso que estuvo en el viaje a Ibiza que algunas de las jugadoras realizaron tras conseguir el título. El juez accedió al careo entre ambos a petición de los abogados de la jugadora, fruto de las discrepancias que observaron entre la declaración como testigo de la amiga y la versión que dio Rivera como investigado, en la que negaba, como el resto de imputados, haber coaccionado a la jugadora.