Es difícil cuestionar un jugador que esta temporada ha conseguido un hat-trick contra el Real Madrid, que suma 11 dianas y que es amigo del mejor jugador del planeta. Es difícil pero también es necesario.
Luis Suárez ya no es el delantero que solía ser. Una misteriosa lesión crónica en la rodilla ha convertido al uruguayo en un jugador pesado, poco explosivo y de toques imprecisos. Su mejor versión ha pasado a mejor vida, pero evidentemente todavía tiene unas virtudes que lo mantienen en el podio de los mejores killers del mundo.
Suárez no negocia los esfuerzos y delante de portería es un futbolista letal, pero en partidos como el del Celta es inevitable preguntarse si sigue siendo la mejor opción para ocupar la punta de ataque del Barça. Cuando no consigue marcar sus carencias son demasiado evidentes. Un tridente Coutinho-Messi-Dembélé, además, suena muy tentador.
Rakitic y los días trabajados
Si la plantilla del Barça funcionara como una empresa normal, Ivan Rakitic podría alargar las vacaciones. El croata es uno de los futbolistas más utilizados por Valverde y la temporada pasada fue el jugador con más partidos disputados en Europa. El croata, sumando las participaciones con el Barça y con su selección disputó 71 encuentros.
Con 30 años de edad el ex de la Sevilla viva la cúspide de su trayectoria deportiva, pero necesita un descanso. Sobre el terreno de juego se le ve lento y poco preciso y en los últimos minutos le faltan pulmones.
Arturo Vidal, Arthur Melo, Carles Aleñá o incluso Riqui Puig. Las alternativas existen, sólo es cuestión de alinearlas.