Pep Guardiola es un ganador nato. Su Manchester City ha derrotado al Aston Villa (1-2) en la final de la Copa de la Liga y el catalán ya suma su primer título de la temporada. Los goles de Agüero y Rodrigo han servido para levantar el trofeo y el City ha confirmado la gran semana que ha tenido.

La semana perfecta de Guardiola

Guardiola ha llegado a la final con la moral por las nubes y es que viene de asaltar el Santiago Bernabéu. Los citizens ganaron por 1-2 al Real Madrid y tienen la eliminatoria de los octavos de la Champions encarrilada. El de Santpedor tiene un idilio con la Copa de la Liga y es que han ganado esta competición por tercer año consecutivo.

Sin prácticamente posibilidades en la Premier League, que parece que está adjudicada al Liverpool, el City quiere luchar hasta el final por las otras dos competiciones, la Champions y la FA Cup. Guardiola quiere seguir reinando en Inglaterra y no hay otra manera que seguir demostrando el dominio sobre el terreno de juego y seguir levantando trofeos.

El Manchester City ha ganado la final con comodidad y con algunos futbolistas con papeles secundarios como Foden y Zinchenko. Guardiola se ha permitido el lujo de dejar en el banquillo titulares indiscutibles como Kevin De Bruyne y Bernardo Silva, pero es que la plantilla de los citizens es una de las mejores de Europa.

Rodrigo ha sido una de las piezas claves de esta final. El ex del Atlético de Madrid y Villarreal ha iniciado la jugada del primer gol y ha marcado el segundo. Sus principales virtudes son la visión y el control que tiene del juego y eso lo convierte en un pilar fundamental en el estilo Guardiola.

El joven Foden, de 19 años, sigue demostrando que es una de las grandes promesas inglesas y tiene una calidad abrumadora en los pies. Precisamente de sus botas ha surgido el pase del primer gol. El City quería sentenciar el partido y ha estado buscando el segundo gol con insistencia hasta que ha llegado.

Polémico segundo gol

Tanto de Rodrigo de cabeza después de un servicio de córner, pero como en toda final no podía faltar la polémica. Este gol no tendría que haber subido al marcador porque venía precedida de un toque de Gündogan y, por lo tanto, el esférico era para el Aston Villa. Error arbitral escandaloso y el Villa que no se lo podía creer.

Con el segundo gol de Rodri no estaba todo dicho y es que Samatta ha recortado diferencias con su gol después de un desajuste defensivo. El City ha sido muy superior durante los 95 minutos, pero como el marcador mostraba el 1-2, podía pasar cualquier cosa. Y es que los de Birmingham han tenido una ocasión clara en los minutos finales.

La pelota ha ido al palo después de una parada majestuoso de Claudio Bravo y el City ha sufrido hasta el final. Victoria del City y primer título del año para Guardiola.