Ya está aquí. Ya llegó el gran día. Sábado de final de Champions con aroma inglés. A un lado, el Manchester City de Pep Guardiola, que vivirá el día más importante de sus 140 años de historia. Al otro, el Chelsea de Tuchel, que en poco tiempo ha pasado de la gran depresión a verse en su tercera final de la Champions, y con los precedentes inmediatos afirmando que conocen la tecla para superar al City, al que eliminaron de la FA Cup y ganaron en su último duelo liguero.

El City, un engranaje perfecto para entrar en la leyenda

Pep Guardiola fichó por el Manchester City para vivir noches como la de este sábado. Tras una enorme inversión que solo valió para disputar unas semifinales de la Champions, el conjunto citizen ha crecido exponencialmente con el entrenador catalán. En 4 temporadas, el City ha acumulado ya 10 títulos, entre ellos 3 Premier League, una era gloriosa, y con un fútbol espectacular, a la que solo le falta el colofón de la Champions para pasar directamente a la leyenda eterna. 

Kevin de Bruyne, en el entrenamiento de este viernes / EFE

Para ello, Guardiola dispone de todo su arsenal, una plantilla fantástica con mil y una opciones posibles que le permitirá poner las piezas a su antojo para intentar contrarrestar el fútbol eléctrico y directo de un Chelsea temible. En un principio, todo apunta a que el entrenador de Santpedor, con Ederson en la portería, apostará por una línea de 4 atrás formada por Walker, Stones, Rúben Dias y Zinchenko.

Más dudas surgen en el centro del campo, donde se encuentra el mayor potencial del Chelsea. En un principio, parece que Guardiola se decantará por Bernardo Silva, Fernandinho y Gündogan, con De Bruyne ayudando desde la posición de falso 9, para crear superioridades. Con el belga con libertad de movimientos, las bandas serán para Mahrez, el ídolo de las semifinales, y Foden, la gran sensación de la temporada.

El Chelsea, un hueso temible en plena efervescencia 

Enfrente estará el Chelsea, que a pesar de haber quedado a 19 puntos del City en la Premier, y de haber entrado casi de milagro en la próxima Champions, se presenta a la gran final de Oporto con muchas opciones de llevarse el gato al agua. Con Tuchel, que llegó a media temporada repelido del PSG, los blues se han transformado en un equipo rocoso atrás, fortísimo en el centro del campo y eléctrico arriba, capaz de eliminar en la Champions al Atlético de Madrid y al Real Madrid y de dejar fuera al City de la final de la FA Cup.

Los jugadores del Chelsea celebran un gol / EFE

Como en el caso de Guardiola, Tuchel tiene un buen fondo de armario para plantear alguna sorpresa, aunque poco a poco parece que se va definiendo en once con el que intentará ganar la Champions. El portero será Mendy, con Christensen, Thiago Silva y Rüdiger en el eje defensivo y Azpilicueta y Chilwell en los carriles. Por delante, en la sala de máquinas, jugarán Jorginho y Kanté, mientras que en la zona ofensiva jugarán Mount, Pulisic y Werner.

 

Imagen principal: Guardiola mirando el entrenamiento previo a la final / EFE