El Manchester United no ha conseguido solucionar sus problemas a pesar de la llegada de Rubén Amorim, reemplazando a Erik Ten Hag. La victoria en el derbi contra el Manchester City parecía ser un punto de inflexión, pero la realidad ha sido muy distinta. Y la goleada contra el AFC Bournemouth ha sido un duro golpe para el entrenador portugués, que todavía tiene mucho trabajo por delante. Y ha pedido a la directiva que realice varias incorporaciones.
Considera que el nivel competitivo de la plantilla es muy bajo, y hay muchos cracks que no pueden seguir en el club. Y también espera que lleguen múltiples galácticos. Ya ha colocado encima de la mesa tres nombres, y el primer objetivo es Viktor Gyökeres, con el cual trabajaba hasta hace tan solo unas semanas en el Sporting de Portugal. Es uno de los mejores delanteros del planeta, y ayudaría a solucionar los problemas de puntería que tienen en Old Trafford.
Joshua Zirkzee y Rasmus Hojlund no están cumpliendo con las expectativas, mientras que Marcus Rashford y Alejandro Garnacho han tenido problemas personales con el entrenador, que pueden provocar que salgan traspasados. Y está desesperado por poder incorporar al goleador sueco, que tiene una cláusula de rescisión de 80 millones de euros, y que está en la agenda de las entidades más poderosas de todo el planeta, gracias a sus habilidades.
Pero no es el único crack que desea incorporar para el ataque, ya que también está obsesionado con Raphinha Dias. Amorim ha quedado sorprendido con el rendimiento de la estrella del Barça, y confía en poder convencer a Joan Laporta y a Deco para que le abran las puertas, aunque sea un pilar indispensable en las alineaciones de Hans-Dieter Flick. A cambio, los ‘red devils’ estarían dispuestos a pagar 80 ‘kilos’ fijos y 10 más en variables.
Una propuesta muy tentadora que puede provocar dudas en el Camp Nou, donde atraviesan una serie de dificultades económicas que todo el mundo conoce.
Gregor Kobel, la última petición de Amorim
Y por último, Amorim está cansado de André Onana, que fue una petición de Ten Hag, y nunca ha convencido con sus actuaciones en la Premier League. Es propenso a cometer errores graves, y la paciencia en el United se ha acabado con el africano.
Para sustituirlo, la opción que más gusta es la de Gregor Kobel, uno de los mejores porteros del planeta, y que busca una salida del Borussia Dortmund.