Una de las peores noticias del Manchester City-Real Madrid en clave blanca fue el pésimo partido de Karim Benzema. El delantero francés, que llegaba al enfrentamiento plagado de dudas después de un segundo tramo de temporada horrible, lo tenía todo en su mano para callar bocas, para demostrar por qué es el actual Balón de Oro. A la hora de la verdad, sin embargo, Benzema certificó que está en un momento de forma paupérrimo. El francés completó un partido horrible, sin presencia en ataque, perdiendo prácticamente todos los balones que tocaba y lento y desaparecido en la presión.
Y la fotografía que ejemplifica su pésimo partido es la del mapa de calor de Benzema, una imagen que no ha tardado en viralizarse por las redes sociales. Y es que el punto más caliente del partido de Benzema en el Etihad Stadium es el del centro del campo, allí donde el delantero francés tocó 5 veces el balón, para reiniciar el juego en el inicio de partido y después de los 4 goles del Manchester City.
Benzema, en caída libre
El problema para Karim Benzema es que ya llueve sobre mojado. Después de firmar una temporada 2021/22 espectacular, el francés no empezó nada bien el curso actual, con problemas físicos y su mal trago en el Mundial de Qatar, en el que Didier Deschamps se lo sacó de encima cuando parecía que el madridista iba a ser una de las estrellas de Francia. Y desde entonces, lejos de ir a más, Benzema ha ido a menos, mostrando un nivel en las antípodas del que le valió la última edición del Balón de Oro.
El delantero francés, que ya tiene 35 años, acaba contrato el 30 de junio, aunque ya tiene la palabra de Florentino Pérez de que será renovado, muy probablemente para un último año de carrera. Falta por ver, pues, qué Benzema se verá la temporada que viene, ya que su estado físico va cada vez a menos.
Un mercado sin delantero top
El Real Madrid, eso sí, va a buscar un delantero centro este verano, ya que ha quedado demostrado que no lo puede apostar todo por Benzema. El gran problema es que no hay en estos momentos ningún 9 de primerísimo nivel en el mercado, ya que Kylian Mbappé no puede salir del PSG, que no lo va a traspasar el verano en el que se va a quedar sin Messi y sin Neymar, y Erling Haaland no se va a ir de un Manchester City que lo ha situado en lo más alto del fútbol mundial, hasta el punto de ser ya uno de los principales candidatos a ganar el próximo Balón de Oro.
A Florentino Pérez, pues, no le quedará más remedio que fichar un delantero de nivel medio, como podría ser Vlahovic, de la Juventus, o Gonçalo Ramos, del Benfica, a la espera de que acaben de explotar en el Real Madrid o, al menos, que se conviertan en suplentes de lujo de Karim Benzema.