Es una de las sensaciones de esta primera mitad de la temporada. Marc Casadó se ha hecho con un sitio al 11 titular y es indiscutible para Hansi Flick. Ocupando la histórica posición de Sergio Busquets, el de Sant Pere de Vilamajor acumula más de 1.700 minutos entre la Liga y la Champions. Una auténtica barbaridad que viene precedida, en cierta manera, por la desgracia de la lesión de Marc Bernal. En lugar de ahogarse por la feroz competencia en medio del campo con nombres ilustres como Pedri, Gavi, Dani Olmo o Frenkie de Jong, el catalán formado en la Masia pisó fuerte y creyó hasta llegar a donde está ahora.
En una entrevista a Mundo Deportivo, repasa la actualidad blaugrana y confiesa el momento mágico que vive estos meses. Debutar con el primer equipo es una proeza a la altura de muy pocos y mantenerse es un lujo y un mérito del jugador. Sobre estos primeros compases, ya con ficha y rol importante del primer equipo, explica sentirse "bien, con ilusión". Además, dice que "tanto la plantilla como la afición tenemos que estar contentos en general con este inicio, aunque es verdad que este último mes ha sido un poco más complicado".
El 25 de diciembre de 2023, Casadó jugaba en Primera Federación y no iba casi nunca convocado con el primer equipo. "Siempre tienes esta ilusión. Sí que es verdad que, vistas las circunstancias, lo veía un poco complicado en algunos momentos de la temporada pasada, pero creo que lo importante fue seguir luchando en todo momento para aprovechar bien la oportunidad si llegaba", se sincera sobre las opciones de jugar en el primer equipo a principios de año.
Tenemos que estar contentos en general con este inicio, aunque es verdad que este último mes ha sido un poco más complicado
El futbolista de solo 21 años tiene un enorme potencial y un gran margen de crecimiento: "Siempre hay margen de mejora para todo. Tanto individualmente como todo el equipo tenemos cosas que mejorar y personalmente diría que tengo que mejorar la llegada a gol. Incluso, a veces los compañeros me hacen la broma que no meto nunca gol. Ojalá que este 2025 llegue alguno", explica en la entrevista a Mundo Deportivo.
Le han comparado muchas veces con Kimmich y este rol que ha adoptado con el Barça de Flick. "Hablamos muchas veces, ya que cuando veo que el equipo se siente incómodo en el campo, hablamos con él para saber qué cree que hay que cambiar o qué necesitamos para estar más cómodos. El entrenador me pide sobre todo que esté bien colocado, que sea intenso y que organice un poco el equipo," finaliza. Por último, y sobre este doble pivote con Pedri, el '17' culé lo define como "un jugador top mundial". Cree que es de los mejores en su posición "y lo demuestra a cada partido". "Me hace mucho más fácil mi trabajo en el campo porque jugar con Pedri hace que todo sea más fácil", acaba diciendo.