Cada vez queda menos para ver lo que todo aficionado al motociclismo está deseando ver, una situación que ha generado gran expectación en la parrilla de MotoGP, ver a Marc Márquez subido a lomos de una Ducati. Será la misma que esta temporada ha llevado el gran candidato al título, y líder momentáneo del mundial, Pecco Bagnaia, la Desmosedici GP23. Una moto que estará 'desfasada' en comparación a la que llevará la próxima campaña el equipo oficial.
A pesar de ello, prácticamente todos los expertos, sitúan al de Cervera como un gran contendiente al título, y en Gresini, donde compartirá box con su hermano Alex, ya se están frotando las manos ante esa posibilidad. Lógicamente, Marc es consciente de que subirse a la mejor moto de la parrilla, le abre de par en par las opciones de volver a conquistar un campeonato del mundo, que le permitiría igualar a su gran rival hasta el momento, Valentino Rossi.
La parrilla tiembla ante la llegada de Marc a Ducati
Y es que los datos invitan al optimismo en el nuevo box del mayor de los Márquez. Hombres como Marco Bezzecchi, esta temporada, o Enea Bastianini la anterior, fueron capaces de luchar hasta el final contra las motos oficiales, empuñando las satélite.
Una situación que deja, más si cabe, con grandes opciones al catalán, que es el mejor piloto de la parrilla y que maximizará aún más las virtudes de la Ducati. Precisamente, por esa misma razón Marc Márquez ha abandonado una relación de 11 años con Honda, que no le podía brindar una moto competitiva.
Nadie quiere ver al octocampeón del mundo a lomos de la Ducati, conscientes de que será el gran rival a batir. Son muchos los que ya están temblando ante la llegada de Marc Márquez a la moto más competitiva de la parrilla, sin embargo, no deberá luchar únicamente con los pilotos de otros equipos.
Márquez y Martín, una relación peor que con Rossi
Y es que, además de tener que batir al resto de escuderías, tiene a su gran enemigo en su misma factoría. No descubrimos nada cuando aseguramos que se ha generado una gran rivalidad entre Jorge Martín y Marc Márquez en los pocos años que lleva el madrileño en la categoría reina del motociclismo.
El piloto de Pramac ha admitido en más de una ocasión que no se lleva nada bien con el catalán, por alguna de las situaciones que se han producido en carrera en las que ambos se han visto involucrados. Eso ha generado una enemistad mayor que la de Marc con Valentino Rossi.
"¿Si tengo una rivalidad con Marc Márquez? Sí. Pienso que sí, porque hemos tenido momentos complicados entre nosotros. Una vez y luego otra y otra. Siempre han pasado cosas entre nosotros y, al final, sí que existe esta rivalidad", dijo el madrileño, que el año que viene luchará contra su archienemigo en Ducati por ser el mejor español de la factoría.