Marc Márquez ha desvelado algunos de los trucos que le han ayudado a adaptarse tan rápidamente a la nueva moto, la Desmosedici GP 25, y que le permitieron arrasar en el primer Gran Premio del año, el de Tailandia, donde mostró una superioridad increíble. Nadie fue capaz de igualar su ritmo, y logró un fin de semana perfecto, con la pole position, la victoria en la Tissot Sprint del sábado y en la carrera del domingo, y la vuelta rápida en ambas pruebas.

La experiencia y el talento son sin duda dos de los grandes factores que sirven para explicar los tiempos que el ‘93’ consiguió, sorprendiendo a sus rivales, y a los mecánicos del Ducati Lenovo Team, ya que no se esperaban que pudiera ir rápido tan pronto, y mostrar su mejor versión. Ha superado las expectativas, y una de las claves ha sido pilotar mucho más tranquilo y limpio, y menos agresivo de lo habitual. Y para ello, se ha visto muchos vídeos de Francesco Bagnaia, su compañero de equipo.
Como el ocho veces campeón del Mundo ha asegurado, quería imitar a ‘Pecco’ para entender cómo puede sacar el máximo rendimiento a la moto, y evitar caerse tanto, y para ello ha tenido que cambiar su estilo de conducción, ya que durante sus días en el HRC Honda Factory Team pilotaba de una manera totalmente distinta. Y viendo los resultados, podemos decir que ha aprendido rápidamente, y que ha estado trabajando muy duro.
Gracias a la estabilidad que le proporciona la Desmosedici, Marc puede utilizar mucho más el freno trasero, gracias al grip que tiene la moto, y también inclinarse menos, para aprovechar la velocidad y la aceleración que siempre ha caracterizado a Ducati. Asimismo, otro punto donde Márquez ha puesto énfasis en mejorar es en las curvas de derechas. Y también se ha fijado en el turinés, que es un especialista en este aspecto, y en su hermano menor, Álex Márquez.

Porque el de Cervera ha asegurado que el ‘73’ también es muy fuerte en este tipo de curvas, donde claramente tenía un gran margen de mejora, en comparación con su punto fuerte, que son las curvas de izquierdas. A sus 32 años, el ex del Gresini Racing Team tiene claro que otra cosa que debe de mejorar es su tendencia a caerse, ya que su cuerpo no es igual de resistente que antes, y es mucho más propenso a tener lesiones, como se ha comprobado en las últimas temporadas, donde ha tenido muchos problemas físicos.
El objetivo de Marc, ser más constante
Marc quiere ser mucho más constante para poder conquistar un nuevo título de MotoGP, que sería el primero en seis años, y para ello sabe que cualquier error se puede pagar muy caro.
Porque una lesión le dejaría prácticamente sin opciones, como le ha sucedido a Jorge Martín.