Marc Márquez lleva desde el 19 de julio pasado con problemas. Una terrible caída y la posterior lesión en el húmero del brazo derecho lo dejó en una situación muy delicada. Y a pesar de una esperanzadora primera operación, la lesión se agravó y tuvo que pasar una segunda vez por el quirófano.

"De moral no es de los mejores momentos", ha asegurado el piloto catalán en una entrevista en DAZN. Márquez, que echa de menos el asfalto y correr sobre la moto, afirma que "se hace extraño, y más después de ocho años en MotoGP y no perderme ninguna carrera".

Y si ayer se confirmó que ya tiene el Mundial perdido después de afirmar desde el equipo Repsol Honda que estará entre dos y tres meses más de baja, Márquez explica que "hace falta descansar y respetar el cuerpo".

Marc Márquez haciendo ejercicios de recuperación

También ha reconocido que la primera operación "salió mal" y que fue un riesgo intentar llegar a tiempo a las siguientes tres carreras después del accidente. "Un hueso tarda entre 6 y 8 semana en soldarse", y este no fue el caso.

Ahora sólo queda esperar que haya un milagro y que la recuperación se adelante, y quien sabe si lo volvemos a ver el próximo mes de octubre sobre la moto.