El calvario de Marc Márquez parece que no tiene final. La lesión que sufrió en el 2020 en Jerez fue el inicio de un seguido de problemas que le han dejado fuera de la lucha por el campeonato mundial en los últimos dos años. Y ahora ha tenido un nuevo imprevisto con forma de lesión que lo deja en una situación muy complicada.
El mensaje preocupante de Marc Márquez
El piloto de Cervera tuvo un espectacular accidente en el pasado Gran Premio de Indonesia. Márquez salió volando de su Honda y se perdió la carrera disputada en el circuito de Mandalika. El resultado de las pruebas que le realizaron fue "un politraumatismo y un traumatismo craneoencefálico con conciencia inestable".
Pero si la baja por precaución parecía que tendría solución a base de reposo, en el viaje de vuelta hacia Barcelona sufrió un nuevo episodio de diplopía. Precisamente, este problema de visión doble ya lo sufrió en el 2011 por primera ve y también a finales del año pasado. Siendo la tercera vez que sufría el mismo problema de visión, volvió a visitarse con el especialista.
A pesar de pensar en un primer momento que sería un problema menos grave que en otras ocasiones, se quiso adoptar un tratamiento conservador. Pruebas periódicas y nueva revisión la próxima semana para confirmar el tiempo de baja final. Pero las noticias que tiene Márquez no acaban de ser las mejores.
"Hoy no me apetece sonreír pero buscaremos la manera de volver hacerlo. Siempre con fuerza", ha escrito Márquez en las redes sociales. Todo esto, acompañado de una fotografía con el rostro serio.
La opción de la retirada
Si se preveía que llegaría para el Gran Premio de Argentina, que se disputa el 3 de abril, ahora hay muchas más dudas. Incluso, se habla de que se podría perder el próximo GP, como también el que se diputa el 10 de abril en Austin, en un circuito en que cada año el piloto de Cervera es protagonista.
Márquez no puede forzar, y se podría complicar su temporada y sus opciones de volver a ganar el Mundial. Pero todavía podría seguir el calvario, ya que se ha llegado a especular que, por culpa del problema de visión, se tenga que plantear la retirada a sus 29 años. Cada caída que tenga, que es bastante habitual en el mundo del motociclismo, podría afectarle a la visión, y los casos de diplopía no acabar de marcharse nunca.