Después de la victoria de Abraham Mateo, Maria Becerra ha sido la encargada de ayudar a distender los ánimos antes del segundo enfrentamiento de la noche. El público se ha levantado al ritmo de la música urbana de la cantante argentina, acompañada al escenario por Lola Índigo.
Estas dos mujeres han sido las encargadas de dar paso al primer combate femenino de La Velada del Año 3: Rivers vs. Rivers. Un combate rodeado de polémica, porque durante el pesaje Marina Rivers acabó llorando por la dificultad a nivel tanto físico como mental que le había supuesto bajar los diez kilos que le habían exigido, ante la pasividad de su contrincante.
Rivers vs Rivers
El combate estaba caliente y se ha demostrado desde el primer momento, cuándo las dos han salido con toda la intensidad del mundo desde el principio. Un intercambio de golpe de puños por parte de las dos sin ningún tipo de miedo, dos contrincantes que ni siquiera se protegían y atacaban una vez y otra.
Marina Rivers, la madrileña, ha demostrado ser muy buena desde la distancia y los puñetazos de lejos, mientras que Sammy Rivers era un poco superior de cerca. La Rivers que jugaba en casa ha protagonizado una serie brillante durante el segundo asalto que lo ha hecho ganarse el favor del público. Las dos guerreras, que han llegado al futuro casi sin fuerzas, han firmado un combate brillante y de lo más emocionante.
Marina Rivers gana el segundo combate
Con un estadio cargado de tensión, el moderador ha levantado el brazo de Marina Rivers. La guerrera madrileña, que hace cuatro meses que suda y llora para prepararse para esta noche, como demostró emocionando a todo el mundo ayer, se ha llevado una ajustada victoria por el voto de dos jueces contra uno.
Rivers ha pensado en la gente que lo ha acompañado en este largo camino: "Muy contenta, gracias a todo el mundo que ha estado cada día". Ante la pregunta de qué pediría, ha querido tentar a la presentadora: "Venganza, Ari vs. Rivers, España contra México".