Mateu Alemany tiene un trabajo complicado, y no es otro que reconstruir al Barça sin apenas dinero y con muchas necesidades. Es por ello que desde su llegada al club, de la mano de las elecciones ganadas por Joan Laporta, ya ha hecho varios movimientos estratégicos en el club, tanto en el apartado económico como en el deportivo, que como siempre, suelen ir de la mano.
Mateu Alemany tiene mucho trabajo por hacer
Tanto las renovaciones de Ansu Fati, Pedri, Ronald Araujo y la de Gavi, que está en camino, como los fichajes de Ferran Torres y Aubameyang, o la cesión de Coutinho al Aston Villa para hacer posible esos fichajes, todos esos movimientos tienen el sello de Mateu Alemany.
Pero le quedan muchísimos más por hacer. Y para ello trabaja codo con codo con Xavi Hernández, que es el encargado de poner a jugar a aquellos jugadores que fiche Alemany. Mateu sabe cual es una de las prioridades que tiene Xavi, que no es otra que la de reforzar la parcela ofensiva con un 9 de garantías.
En enero le pidió a Morata y, aunque no pudo ser, llegó Aubameyang sobre la bocina y el gabonés ha convencido al entrenador para que tenga un sitio reservado en la plantilla del próximo curso. Pero quien no está convenciendo es Memphis Depay.
Memphis tiene muchas papeletas de salir
El neerlandés llegó gratis el pasado verano con el aval de Ronald Koeman, que todavía era entrenador del Barça y lo había tenido en la selección de los Países Bajos. Sus primeros meses fueron muy buenos, pero se ha ido apagando, y es claramente suplente, tanto si lo contamos como delantero centro, donde está por detrás de Aubameyang, o como extremo, en desventaja con Ferran Torres, Dembélé, o Ansu Fati, que está volviendo.
Firmó por dos años, por lo que este verano es la mejor ocasión que tiene el Barça para poder hacer caja con él, y Mateu Alemany no quiere desaprovecharlo, según publica Sport. Además, el deseo del club sigue siendo intentar fichar a Robert Lewandowski, que también acaba contrato en 2023, y si se pudiera cerrar su incorporación, el neerlandés todavía sería más prescindible.
Su llegada fue recibida como un soplo de aire fresco, pero si el Barça cumple sus planes y su hoja de ruta, la etapa de Memphis Depay como blaugrana habrá durado apenas un año. Lo cierto es que ya no le quedan partidos para que Xavi cambie de opinión, y su continuidad solo va a depender de si Mateu consigue un traspaso por él o no.