Es una decisión dura por muchos motivos, traumática, pero clave. El Barça necesita que Gerard Piqué se vaya el próximo 30 de junio, que renuncie al año que le quedaría de contrato, para aligerar notoriamente la masa salarial de la plantilla y fichar a los jugadores que requiere Xavi, con Bernardo Silva como máxima prioridad. Y es que tal y como informa este sábado Culemanía, Piqué es el futbolista mejor pagado del Barça. Tal y como adelantó el diario El Mundo, el central tiene garantizada una retribución media de 28,4 millones de euros brutos, que ascenderían hasta los 36,5 si Piqué disputa más del 50% de los partidos y si el Barça gana el triplete. Es difícil, pero no imposible.
Esta temporada, Piqué tiene asegurado ya el cobro de 20,7 millones. Si juega menos del 35% de los partidos, quedará libre el 30 de junio; si supera esa cifra de partidos, con un mínimo de 45 minutos por enfrentamiento, el central cobrará un plus de 2,8 millones, además de ver su contrato alargado hasta el 2024.
Hasta 41,3 millones de euros en juego
El Barça podría lograr un ahorro de hasta 41,3 millones de euros si logra desligar a Piqué del club, una cantidad de dinero que no se puede permitir. Tal y como informo Culemanía, durante la temporada 2023/24, el central cobraría 13,6 millones de euros como salario fijo, a lo que se añadirían 9 millones más como prima de finalización de carrera. Además, se podrían añadir 2,8 millones si vuelve a disputar más del 35% de los partidos y más primas según la fase a la que logre llegar el Barça en la Champions. Si el equipo se proclama campeón de Europa, por ejemplo, hay un plus de 9,2 millones, que ascenderían a un máximo de 3,8 millones más si se gana el triplete.
En total, pues, el Barça podría llegar a ahorrarse 41,3 millones de una sola temporada, lo que convierte en tarea principal convencer a Gerard Piqué de que lo mejor para todos es que se vaya el próximo verano.
Piqué ayudará, pero no se quiere ir
El gran problema es que Piqué no se plantea en estos momentos salir del Barça. Considera que está en forma como para ser titular e importante, y va a pelear por ello. El central está dispuesto a diferir salario, e incluso a rebajarse la ficha para ayudar al club, pero no se quiere ir por la puerta de atrás.
El sueño de Piqué es colgar las botas en el 2024 liderando un Barça campeón. El proyecto de Xavi le motiva y entiende que puede aportar calidad y experiencia, como ya hiciera en su día Puyol. Retirarse siendo suplente y un año antes de lo esperado no está en sus planes.