Xavi Hernández se empeñó e hizo todo lo posible para conseguir que retuvieran a Ousmane Dembélé este verano. Aunque ya todo estaba preparado para despedirse de él, finalmente el Barça decidió hacer un nuevo intento y presentar otra oferta de renovación al extremo de 25, que terminó quedándose. Una noticia que sorprendió a todos, considerando que Joan Laporta y Mateu Alemany ya lo daban por perdido, e incluso le habían criticado públicamente.
Pero la insistencia del entrenador de Terrassa fue clave para que el ex del Borussia Dortmund y del Stade Rennais se quedara. Y ha seguido demostrando una enorme confianza en sus cualidades, como ya lo hizo la pasada campaña, siendo titular indiscutible. Una confianza a la cual respondió con buenas actuaciones, acabando como el máximo asistente de La Liga Santander, por delante de Karim Benzema y de Vinicius Junior, las dos grandes estrellas del Real Madrid.
Lo único que se le reprochaba a ‘El Mosquito’ era su falta de puntería, y es que es una evidencia que necesita marcar más goles para poder ser determinante y diferencial. Un aspecto que ha mejorado ligeramente. En el Camp Nou estaban encantados con él, sin embargo, nuevamente ha comenzado a generar dudas después de su paupérrima actuación frente al Bayern de Múnich, donde volvió a recordar a ese futbolista errático y precipitado en sus decisiones.
Aunque generó peligro en un par de acciones con su velocidad y su talento, lo cierto es que nuevamente Dembélé cometió muchos fallos a la hora de dar el último pase. Perdió una gran cantidad de balones en el Allianz Arena, y pese a que se debe de valorar que no dejara de intentarlo en ningún momento, no resultó decisivo. Por ese motivo, Alemany y Laporta han comenzado a sospechar que no es un crack con el nivel necesario para resolver partidos de máxima exigencia.
Y empiezan a creer que Xavi les engañó, y en realidad Anssumane Fati es mucho mejor que el campeón del Mundial de Rusia, pese a que no esté en un buen momento de forma. Porque él sí puede marcar las diferencias gracias a su facilidad goleadora.
Dembélé sigue teniendo su puesto asegurado
A pesar de todo esto, la confianza en Dembélé por parte del cuerpo técnico sigue siendo máxima. Creen que es evidente que tiene muchas cosas por pulir, pero que aporta una cosa de un valor incalculable, y es su improvisación y su imprevisibilidad. Además, ha demostrado una buena conexión con Robert Lewandowski, como se pudo ver nuevamente contra el Elche.
A eso hay que añadir que el ‘7’ parece estar más motivado y centrado que nunca, y ha dejado atrás sus problemas de actitud y de lesiones.
Está totalmente implicado con la causa.