El Barça hace tiempo que decidió que el fichaje de Erling Haaland es una prioridad. En el club entienden que la base del nuevo proyecto de Xavi Hernández ya ha cogido forma, pero que le falta un jugador diferencial que le permita dar un paso adelante. El equipo juega bien, cada vez es más competitivo y está interiorizando la pizarra de Xavi, pero la sensación es que falta gol, por lo que Haaland es un fichaje necesario.
El problema es que para entrar, primero hay que dejar salir, pues la ficha de Haaland sería la más alta de la plantilla. Algún peso pesado del equipo deberá irse con total seguridad y en el listado elaborado están Gerard Piqué, Jordi Alba, Sergio Busquets, Frenkie de Jong y Marc-André Ter Stegen.
Ter Stegen es transferible
La problemática fue transmitida a Xavi Hernández, que en las últimas semanas junto a Mateu Alemany ha estado analizando a consciencia qué jugador, o jugadores, debería ser el sacrificado. El entrenador cree que Piqué y Busquets son imprescindibles, además de que confía en recuperar al mejor De Jong. Los finalistas, pues, son Jordi Alba y Ter Stegen. A Xavi le gustan mucho los aportes de Jordi Alba, pues tiene una gran capacidad para interpretar sus ideas, pero al mismo tiempo es consciente de que el lateral empieza a sufrir los efectos lógicos de la edad. Si el Barça logra fichar a Gayà o a Grimaldo, Alba saldrá, mientras que si el fichaje no es posible el lateral del Hospitalet seguirá.
Y es que en el Barça cada vez tienen más claro de que ha llegado la hora de traspasar a Marc-André Ter Stegen. El alemán, que ya tiene 30 años, ha bajado su nivel de una forma muy preocupante, a lo que hay que añadir que persisten los problemas en su rodilla, que ya le obligaron a pasar por el quirófano en verano, lo que provocó que se perdiera la Eurocopa.
Ter Stegen, otro humano más
Y es que Ter Stegen ya no es aquel portero salvador de antes. Como le ha ocurrido al Atlético de Madrid con Oblak, el alemán combina alguna parada de cierto mérito con errores incomprensibles, además de encajar goles con demasiada facilidad. El Barça, por ejemplo, ha encajado en el primer disparo que ha recibido en los 3 últimos partidos, contra el Valencia, el Nápoles y el Elche, lo que denota una fragilidad muy preocupante, pues el equipo concede menos ocasiones que antes.
Ter Stegen sabe que está en el punto de mira, lo que parece que todavía le ha afectado más. En cuando al sustituto, el favorito era Onana, que hace unas semanas se comprometió con el Inter de Milán. A Xavi Hernández le gusta Arnau Tenas, el portero del Barça B, que podría tener la oportunidad de hacer con la titularidad, aunque no se descarta el fichaje de un portero suplente para complementar la posición, pues Neto saldrá con total seguridad.