Max Vertappen ha ganado a la banca en el día que la ruleta ha sido protagonista en el Gran Premio de Las Vegas de Fórmula 1. Un incansable Charles Leclerc ha sido segundo y Checo Pérez ha acabado en tercera posición. Aunque Carlos Sainz y Fernando Alonso han remontado de manera inesperada después de quedarse sin crédito en la primera vuelta, finalmente se marchan de Estados Unidos con algunos puntos, pero sin el resultado deseado.
Un caótico e inesperado inicio de noche en Las Vegas
Carrera muy loca desde el principio y con cambios de estrategia y sensaciones de manera constante. La ruleta del casino de Las Vegas se ha puesto en marcha ya desde el principio, con Alonso y Sainz saliendo desde la zona media, y sufriendo un trompo en la primera curva. Neumáticos fríos y poca adherencia sobre el asfalto. Y los dos pilotos españoles se han visto rápidamente situados en las últimas posiciones y con la obligación de detenerse en las primeras de cambio. Y aunque Verstappen ha adelantado a Leclerc en esta misma primera curva para situarse líder, posteriormente ha sido sancionado con 5 segundos de penalización por una maniobra peligrosa.
Pero estos toques en los primeros metros de la larguísima carrera de Las Vegas, con 50 vueltas en el circuito de 6,2 km —superando los 300 totales—, han provocado la salida del Virtual Safety Car, como si el crupier empezara a jugar. Y cuándo se ha resuelto, accidente espectacular de Lando Norris en la vuelta 3 y salida del Safety Car. Con la carrera perdida, Lance Stroll, Checo Pérez, Carlos Sainz, Fernando Alonso y Valtteri Bottas han hecho la primera parada al box.
Neumáticos duros para los últimos y remontada. Varios cambios de posición entre Pérez, Sainz y Alonso, pero manteniendo las posiciones después de la primera batalla. Y entonces, junto con Stroll —por delante— han empezado a adelantar a rivales más lentos. Muy buen ritmo del neumático duro y récords de vuelta para un creciente Alonso.
Y aunque parecía que sería una nueva carrera fácil para Verstappen, sus neumáticos se han desgastado muy rápidamente y Leclerc ha recuperado el liderato de la carrera en la vuelta 16. Nuevo giro de guion en una noche que todavía no se había acabado. Pinchazo de un desafortunado Lewis Hamilton, luchando por estar dentro de los puntos, y nuevos cambios de ruedas para muchos pilotos. Pero al mismo tiempo ha tenido que salir un nuevo Safety Car después de un toque entre Verstappen y George Russell en el ecuador de la carrera.
Max Verstappen confirma su dominio en la ruleta
Y en la segunda parte de la carrera ya no ha habido más coches de seguridad y se ha acabado confirmando la dinámica esperada. Ya nadie jugaba a la ruleta y todo el mundo se ha marchado hacia el hotel con su mejor recaudación. En la vuelta 32 ha habido el adelantamiento de Pérez sobre Leclerc para liderar la carrera. Y poco a poco el piloto monegasco ha ido sufriendo por culpa de sus neumáticos, demasiado viejos.
Y eso lo ha aprovechado Verstappen, como si fuera un multimillonario que ha llegado sin frenos para ser el ganador de la noche. Primero ha superado a su compañero de equipo y después ha sido el turno de pasar a un decreciente Leclerc. También el piloto mexicano de Red Bull ha superado al monegasco de Ferrari en busca de un nuevo doblete de la escudería austríaca. Pero cuando todo el mundo pensaba que Red Bull se iría de Las Vegas ganándolo todo, la noche ha acabado con Leclerc superando a Pérez en la última vuelta y subiendo al segundo peldaño del podio. Con respecto a los pilotos españoles, desplomados y sin mucho dinero, Carlos Sainz ha acabado sexto gracias a una penalización de 5 segundos a Russell al final de la carrera, y Fernando Alonso se ha tenido que conformar con la novena posición.