Ahora mismo, nadie tiene ninguna duda acerca del futuro de Kylian Mbappé, que no pasa por el Paris Saint-Germain. Se muestra muy descontento por las promesas que le hicieron el pasado verano, cuando renovó, y no está satisfecho con la planificación de la plantilla. Cree que no están preparados para competir por la Champions League, y no cree en el proyecto de Luis Enrique. Por lo tanto, tiene decidido salir este año, y ha elegido su próximo reto.
Evidentemente, el destino soñado por el ex del AS Mónaco es el Real Madrid. Se arrepiente de no haber aceptado la oferta que le presentó Florentino Pérez hace 12 meses, y se ha disculpado en privado con el presidente, que ha comenzado a acelerar las gestiones para llegar a un acuerdo con Nasser Al-Khelaïfi, y firmar al astro de 24 años. La idea es que llegue antes del 15 de agosto, y que tenga un coste inferior a los 200 millones de euros.
Pero el aterrizaje del ganador del Golden Boy en el año 2017 tendrá consecuencias lógicas. Porque pasará a ser la estrella del equipo, una cosa que no gustará a Vinicius Junior, y relegará a la suplencia a algunos cracks que verán como su protagonismo se reduce considerablemente. Aparte, la necesidad de obtener ingresos en el Santiago Bernabéu para compensar la balanza económica provoca que tres piezas puedan irse. Comenzando por Aurelien Tchouaméni.
Si bien es cierto que el pasado curso fue suplente habitual en los esquemas de Carlo Ancelotti, la intención es que siga en la plantilla. Pagaron mucho dinero por él, y todavía es realmente joven, 23 años, así que la idea es que se mantenga en el vestuario, y demuestre que puede ser una pieza muy importante. Pero puede ser ‘sacrificado’, tal y como ocurre con Fede Valverde, del cual también se está hablando mucho a lo largo de los últimos días.
Han llegado muchas llamadas por el internacional uruguayo, que puede ver como su plaza en el once inicial del Madrid pasa a ser ocupada por Mbappé, y tiene que conformarse con ser un simple revulsivo.
Rodrygo Goes, el último afectado
Y, por último, tenemos a Rodrygo Goes, que apunta a estar entre los afectados por el aterrizaje de Mbappé. Por mucho que Ancelotti asegure tener una confianza máxima en las capacidades del brasileño, la realidad es que el Madrid no cierra las puertas a una venta multimillonaria.
Alguno de los tres puede abandonar el equipo antes de que acabe el mercado veraniego…