El Real Madrid sigue insistiendo con Kylian Mbappé, y pretende hacer una nueva ofensiva por él. De momento, el plan que está siguiendo Florentino Pérez es el de la tranquilidad. No tiene prisa, y ahora mismo está centrado en otros objetivos, como la contratación de un lateral diestro y la de Jude Bellingham, del Borussia Dortmund. Si es necesario, no tendrá problemas en esperar al astro del Paris Saint-Germain durante otro año más.
Porque sabe que finaliza contrato en 2024, y que en ese momento podría llegar con la carta de libertad. Es decir, lo que estaba previsto que sucediera el pasado verano, cuando a última hora decidió aceptar la propuesta de ampliación que le presentó Nasser Al-Khelaïfi, una cosa de la que se muestra completamente arrepentido. Le hicieron una serie de promesas que no se han cumplido, y está muy descontento con el proyecto que hay actualmente.
Así que no volverá a caer en la trampa, y se marchará del Parque de los Príncipes más pronto que tarde. En ese sentido, no tiene ningún tipo de duda acerca de cuál es su destino predilecto, y evidentemente nos referimos al Santiago Bernabéu. El presidente está dispuesto a perdonar al ex del AS Mónaco, ya que no siempre se presenta la oportunidad de firmar a un futbolista de su nivel y sus cualidades, y está convencido de que la afición también lo hará.
No obstante, Florentino Pérez sabe que hay otro problema que debe de solucionar, y que tiene a Vinicius Junior como protagonista. Para empezar, lo primero que tiene que hacer es cerrar la ampliación del brasileño, que solamente tiene firmado por 12 meses. Pero está convencido que no habrá problema en esto, y podrán entenderse fácilmente. Y el segundo dolor de cabeza que se le plantea es el hecho de que ambos comparten la misma posición.
Y es que se sienten más cómodos jugando en la banda izquierda, así que uno de los dos debería de hacer un esfuerzo, y cambiar de rol.
Mbappé, el elegido para ocupar otra demarcación
Con la presencia de Mbappé y de ‘Vini’ en la plantilla, el Madrid se aseguraría tener un ataque temible, formado por dos de los cracks más desequilibrantes y diferenciales del planeta, y fácilmente podrían superar los 50 goles por temporada solamente con los goles de ambos.
La idea de Florentino Pérez es que el ‘20’ siga jugando en el carril zurdo, y desplazar al campeón del Mundial de Rusia a la banda derecha o al centro del ataque, donde también puede jugar, y de hecho lo hace normalmente con su selección y, en ocasiones, en el PSG.