Ha llegado el momento clave en el FC Barcelona. La hora de ponerse manos a la obra para cerrar todos los flecos, lanzarse a por los objetivos prioritarios y dar salida a aquellos futbolistas con los que Hansi Flick no cuenta. Y aunque no se espera una gran revolución con la llegada del técnico alemán, sí que habrá alguna que otra sorpresa. En la entidad blaugrana lo primero es aligerar la operación salida, para hacer hueco a las futuras incorporaciones que ha solicitado el nuevo entrenador culé para tener las piezas idóneas para practicar su idea de juego.
Deco ya se ha puesto manos a la obra para satisfacer los deseos de su nuevo entrenador. Sin tiempo que perder, y en sintonía con Flick, el director deportivo portugués trabaja para ir cerrando las múltiples carpetas que tiene encima de la mesa y ha activado sus contactos para empezar a colocar a los descartes del técnico alemán. En ese sentido, coge fuerza la salida de uno de los defensas que parecía haberse ganado un hueco en el primer equipo del Barça.
La economía implica hacer un gran sacrificio
Deco ha activado la vía portuguesa para darle salida a Mika Faye, central del Barça Atlètic. El joven defensor blaugrana tenía todas las papeletas para entrar en dinámica del primer equipo, renovar su contrato para blindarlo, y pasar a formar parte a todos los efectos de la plantilla de Hansi Flick, pero todo ha cambiado. La plantilla culé tiene overbooking en esa demarcación, y el potencial que se le estima al jugador, de 19 años, lo convierten en una venta casi obligada, que permita al club hacer frente a otras operaciones.
Se confía mucho en el joven central, desde la dirección deportiva y desde el cuerpo técnico, pero de la necesidad hay que hacer virtud. En el Barça son conscientes que Faye despierta el interés de grandes clubs y pueden cerrar una venta muy beneficiosa para sus intereses. Consciente de ello, Deco, que mantiene grandes relaciones con el Oporto, ya ha iniciado las negociaciones con su nuevo presidente, André Villas-Boas, según ha informado Sport. En la reunión se habló de la posibilidad de alcanzar un acuerdo por el futbolista senegalés.
Deco y la vía portuguesa
De hecho, el representante de Mika Faye y el club catalán ya habían planteado esta situación, conscientes de que podía ocurrir y alcanzaron un acuerdo. Ambas partes decidieron que si llega una oferta por el defensor de 15 millones de euros, que el jugador considere atractiva desde el punto de vista deportivo y económico, se aceptará. Eso sí, conscientes del potencial que atesora el senegalés, el FC Barcelona siempre se reservaría una opción de recompra con un precio pactado previamente e incluirá un porcentaje de plusvalía sobre una posible venta.
Precisamente, eso es lo que están tratando Deco y Villas-Boas. Una venta por 15 'kilos' con todas las exigencias que la dirección deportiva culé impone para que el central se marche al Oporto, pero sin salir del radar blaugrana. Y, de momento, en el Barça son optimistas, pues las negociaciones van por buen camino. El director deportivo portugués considera que los dragones son el destino ideal donde seguir creciendo, y también se ha hablado sobre la posible salida de Vitor Roque hacia do Dragão.