El Barça de Hansi Flick empieza a coger forma, pero solo sobre el papel. El nuevo entrenador blaugrana ya visitó las instalaciones culés y se reunió para planificar la plantilla de la próxima temporada, pero al mismo tiempo tuvo muy claro como actuar a partir de ahora. Y a pesar de fijarse en la Eurocopa, tiene un objetivo muy claro y parece que no lo quiere cambiar a pesar de ser de los mejores de la cita de selecciones.
El Barça tiene que fichar a un nuevo mediocentro
El Barça se tiene que reforzar sobre todo en la posición de mediocentro, ya que desde la salida de Sergio Busquets que no se ha encontrado un solo futbolista capaz de llegar a hacer ni un poco de sombra al pivote catalán. Oriol Romeu era la solución inicial, pero no sirvió. Y después se hicieron otras pruebas que tampoco se acabaron de consolidar.
Y por esto antes y después de la llegada de Hansi Flick al banquillo culé el fichaje de un mediocentro titular y de nivel mundial es la prioridad número 1. El club blaugrana necesita encontrar esta figura importante y que pueda marcar las diferencias sobre el césped. Pero se tiene que hacer una gran apuesta y que sea firme desde el primer momento. Tiene que ser un jugador consolidado en el primer nivel fútbol europeo.
Joshua Kimmich, la apuesta prioritaria de Hansi Flick
Y el último nombre que ha aparecido en la lista de futuribles culés, pero que ya sonar cuando Xavi Hernández era el entrenador del Barça, es Stanislav Lobotka. El mediocentro eslovaco del Nápoles ya recibió el premio al mejor jugador del Bélgica-Eslovaquia. Y por eso ha vuelto a sonar como futurible del Barça.
Sin embargo, Hansi Flick no quiere escuchar más nombres de mediocentros, ya que su apuesta principal era y sigue siendo la de Joshua Kimmich. El pivote alemán del Bayern de Munich también está siendo un futbolista destacado de la selección alemana en la Eurocopa, aunque en el debut jugó como lateral derecho.
Por lo tanto, apuesta muy clara del Barça de Flick con Kimmich. El jugador alemán ya conoce al actual entrenador blaugrana de su etapa como entrenador del Bayern y de la selección de Alemania. Y en su momento ya lo convirtió en un futbolista imprescindible, como ahora lo querría convertir en un intocable de su Barça. Y ahora el trabajo, ya después de la Eurocopa, será de la dirección deportiva culé, que tendrá que negociar la compra con un Bayern de Munich reticente a la venta y que sabe que tiene al futbolista atado por contrato hasta el 2025.