La salida de Leo Messi sigue siendo un trauma y un episodio que no se desea recordar en el Barça. Porque, aunque ahora se esté hablando seriamente de su regreso el próximo año, todavía produce escalofríos recordar su dolorosa huida al Paris Saint-Germain. Más allá de ser el capitán de la plantilla y el jugador más importante en la historia de la entidad, fue muy comentada por la polémica que la rodeó, debido a que se daba por hecha su renovación.

Joan Laporta anunció que todo estaba acordado, y por lo tanto cumpliría con su gran promesa, que era retener al ídolo de la afición. Había conseguido que cambiara de opinión, y ya no pensara en mudarse, y cuando parecía cuestión de tiempo anunciar su continuidad, todo cambió en el último momento. Los problemas económicos de la institución, que provocaron que no pudiera ser inscrito, desembocaron en la decisión de separar sus caminos.

El astro argentino se marchó totalmente hundido, entre lágrimas, y en contra de su voluntad. Y aún a día de hoy echa mucho de menos su vida en España, pues las cosas no le han ido nada bien desde que aterrizó en el Parque de los Príncipes, ni a nivel deportivo ni a nivel personal. Y con el paso del tiempo ha comenzado a identificar a los culpables de que esto sucediera. En este sentido, responsabiliza un poco al presidente, pero entiende que no podía hacer mucho más.

En cambio, quien sí pudo poner de su parte para que Messi se quedara, y no hizo absolutamente nada, fue Gerard Piqué. Estaban negociando una rebaja en su salario, que finalmente se demoró, y no se anunció hasta después de la salida de Leo con dirección al PSG. Una cosa que lleva a pensar que el central catalán lo hizo a propósito, y no quería que su ex compañero se quedara en el Camp Nou. Porque todos sabemos la pésima relación que tienen.

Gerard Pique/ Foto: FC Barcelona

Si antes ya no se podían ni ver, después de que esto sucediera el siete veces ganador del Balón de Oro siente todavía más enemistad con el central catalán. Le considera uno de sus grandes enemigos, y una persona ‘non grata’, razón por la cual ni siquiera apareció en su cena de despedida.

Philippe Coutinho, otro culpable de la salida de Messi

Como es lógico, Piqué no puede cargar con todas las culpas, ya que hay más jugadores que podrían haber hecho algo para ayudar, aunque fuera un poco, a que Messi siguiera. Y otro nombre que aparece en la lista de señalados es Philippe Coutinho, que se negó a dejar el Barça, donde era el mejor pagado de la plantilla.

Philippe Coutinho/ Europa Press

Con su venta, hubiesen podido inscribir a Messi, pero no quiso cambiar de aires. Aunque finalmente sí que aceptó marcharse en enero, para aterrizar en el Aston Villa en condición de cedido.

Y finalmente ha sido traspasado por 20 millones de euros.