El Barça vuelve a ser el Barça gracias a la persistencia de Luis Suárez y a los récords de Leo Messi. El conjunto culé ha derrotado al Eibar en el Camp Nou en el primer partido del año en casa y ha demostrado que la derrota de Copa es pasajera (3-0).
Suárez y Coutinho, funcionan
Si juegan los titulares, todo vuelve a la normalidad. El Barça más motivado y revitalizado ha vuelto a exhibirse ante su afición, aunque también ha perdonado lo que podría haber sido una nueva goleada contra un rival acostumbrado a recibir mucho en el estadio barcelonés.
Un Barça con un once de gala, con el retorno de Arthur y la confianza en Coutinho, han conseguido llevar el buen fútbol al primer partido del año en el Camp Nou. Todo ha sido cosa de jugar con los mejores, con titulares, y obviamente con Messi.
La sorpresa, sin embargo, no estaba en el once del Barça, ni en el de un Eibar donde juega Marc Cucurella, cedido por el conjunto culé y que ha debutado en el estadio blaugrana. El conjunto de Ernesto Valverde tiene días de todo: ya puede ser que desfallezca contra el Levante o rinda al máximo con el mejor fútbol. Esta vez no ha sido ni un extremo ni el otro, pero los blaugrana han conseguido los tres puntos con una adaptación muy buena.
El Eibar ha presionado como nunca, casi sin dejar respirar al Barça, pero Messi, Coutinho, Suárez, Jordi Alba y Sergi Roberto daban aire al equipo en velocidad. Las combinaciones eran complicadas porque el rival estaba muy bien cerrado, y entonces han llegado los pases en largo a espaldas de la defensa vasca.
Así y todo, la manera de desencallar el partido ha sido gracias al ADN más culé. Al primer toque y con una jugada trenzada por cuatro futbolistas (Arthur, Busquets, Coutinho y Luis Suárez), el Barça ha abierto la lata. Era el minuto 19 cuando la magia ha llegado en el Camp Nou y el uruguayo ha resuelto a la perfección una jugada espectacular.
Poco a poco parecía que la sorprendente apuesta de Coutinho por Dembélé cobraba sentido. A pesar del bajo rendimiento del brasileño, Coutinho ha dado un paso adelante y ha dirigido al equipo en las tareas ofensivas. Y mientras tanto, Messi ha sido el espectador de lujo de un partido que se iba cocinando a fuego lento para finalmente él hacer su estocada de récord.
Messi ya lleva 400
Pero todo el mundo sabía que tarde o temprano llegaría el momento del mejor '10' de la historia. Messi estaba mustio, no participaba tanto como en otras ocasiones, pero ha aparecido cuando todo el mundo lo necesitaba.
Ya en la segunda mitad, en el minuto 53, ha llegado el momento esperado. Combinación entre Luis Suárez y el argentino, y Messi, con la pierna izquierda establece un nuevo récord: 400 goles en la Liga. Una cifra inédita y sólo a su alcance. Además, ha sido su decimotercero gol en nueve partidos contra el Eibar.
No ha sido la tarde del líder culé, pero la goleada habría podido ser más grande. Muy buen entendimiento entre el tridente Messi-Suárez-Coutinho, que ha hecho levantar una vez y otra a un Camp Nou entregado. Incluso, ha habido tiempo para que Suárez hiciera su doblete poco después de la diana histórica de Messi.
El Eibar, muy tocado con los goles, no ha podido reaccionar en ningún momento. Después ha llegado media hora para dar descansos: Arturo Vidal entra por Busquets, Dembélé en el sitio de Arthur y Semedo por Sergi Roberto.
En la tarde del récord de Messi, los aficionados del Barça han visto la primera victoria del 2019 en el estadio y la novena victoria contra el Eibar (nunca han perdido). El Barça hace el trabajo, con la sexta victoria consecutiva en la Liga, y cierra la primera vuelta como líder y con una distancia de cinco puntos respecto del Atlético de Madrid.