El Inter Miami prepara un bombazo en el mercado. Con Sergio Busquets cerca del retiro y la necesidad de seguir construyendo un proyecto competitivo alrededor de Leo Messi, David Beckham ha activado la maquinaria para fichar a uno de los mejores centrocampistas de la última década: Kevin De Bruyne. El belga, que dejará el Manchester City este verano, está en el radar del club estadounidense, y ya hay contactos avanzados para cerrar su llegada a la MLS.
De Bruyne apunta a Miami
De Bruyne ha decidido poner punto final a su etapa en el fútbol europeo. Tras más de una década a máximo nivel en la Premier League, donde se ha consolidado como uno de los grandes arquitectos del juego moderno bajo las órdenes de Pep Guardiola, el belga busca ahora un cambio de vida. Y la propuesta del Inter Miami le encaja perfectamente: sol, calidad de vida, estabilidad familiar y un proyecto ambicioso junto a varias leyendas del fútbol con las que ha compartido escenario en Europa.

Beckham, presidente y principal impulsor del club, conoce bien las intenciones del jugador y de su entorno. Su objetivo es convencerle de que rechace las ofertas multimillonarias que le llegan desde Arabia Saudí, una opción que no termina de seducir al futbolista. De Bruyne y su familia quieren instalarse en un entorno más cálido y tranquilo que el lluvioso Manchester, y Miami se presenta como el lugar ideal para esta nueva etapa.
Messi da luz verde
Pero la operación va más allá del interés del club. Fuentes cercanas aseguran que Leo Messi ha dado luz verde al fichaje y ve con buenos ojos formar una dupla con el belga, que podría ser histórica en la MLS. El argentino ya ha coincidido con De Bruyne en varios encuentros de selecciones y lo considera un jugador ideal para llevar el timón del equipo, sobre todo teniendo en cuenta que Busquets podría colgar las botas a final de temporada.
El centrocampista catalán termina contrato en diciembre de 2025, pero aún no ha renovado ni dado pistas sobre su futuro. En el club asumen que esta será su última temporada, y Beckham ya se ha adelantado al escenario buscando un relevo de garantías. De Bruyne sería el heredero perfecto de Busquets, no solo por su visión de juego y liderazgo, sino también por su capacidad para marcar la diferencia en partidos clave.

La llegada del belga también supondría un impulso brutal para el crecimiento de la MLS. La presencia de estrellas como Messi, Suárez, Jordi Alba o Busquets ya ha disparado la atención mediática, pero la incorporación de De Bruyne, aún en plena forma y con calidad de sobra para marcar diferencias, llevaría la liga a un nuevo nivel.
Todo apunta a que las negociaciones seguirán intensificándose en las próximas semanas. Beckham lo tiene claro: quiere cerrar cuanto antes una operación que uniría a Messi y De Bruyne en una de las duplas más talentosas de los últimos años. Una sociedad que podría dominar la MLS y dejar una huella imborrable en el fútbol estadounidense.