Gerardo Martino salió en rueda de prensa a desmentir por completo la posibilidad de que Leo Messi regrese al Barça, un rumor que había ganado fuerza en las últimas semanas. Porque se estaba especulando con la posibilidad de que pudiera vivir una segunda etapa en el conjunto azulgrana en un futuro, aunque fuera en calidad de cedido por el Inter de Miami. Pero el técnico argentino afirmó que todo era falso, y que esto no sucederá.
“¿Messi a Barcelona? Será para dar un paseo, no había oído nada de este tipo de rumores. Me sorprende. Si me dices que va de vacaciones o a visitar Barcelona, es probable, el resto lo desconozco” bromeó ‘el Tata’. Pero la realidad es que Joan Laporta tiene muy avanzadas las gestiones para conseguir que el siete veces ganador del Balón de Oro juegue de nuevo con la elástica culé, y se ponga a las órdenes de Xavi Hernández… aunque solamente sea por una noche.
Porque la intención que tiene el presidente es realizar un partido homenaje a la figura del campeón del Mundial de Qatar, quien no se pudo despedir de la manera que a todo el mundo le hubiera gustado. Lo hizo en una rueda de prensa que fue muy emotiva, pero no tanto como si lo hubiera hecho sobre el terreno de juego. Por ello, tendrá la oportunidad de hacerlo desde el césped, y en un contexto de celebración, ya que está previsto que sea para inaugurar el nuevo Camp Nou.
Una cosa que está previsto que ocurra el próximo año, en 2024. De momento, el estadio del Barça está en un proceso de reconstrucción, y las obras siguen en marcha. Pero en un periodo de tiempo cercano a los 12 meses, todo debería de estar acabado, para poder tener un estreno triunfal. Y no hay mejor manera que con Messi, el futbolista más importante de la historia de la institución, jugando junto al resto de sus antiguos compañeros.
David Beckham valora con muy buenos ojos esta idea, y no se opondría en absoluto. De hecho, ya ha dado el OK a Laporta.
Messi jugaría 45 minutos con cada club
Messi podría ponerse otra vez el escudo del Barça en el pecho, si bien solamente sería durante 45 minutos, ya que jugaría un parte con cada club, una cosa similar a lo que hizo Raúl González Blanco en su momento, cuando pertenecía al Schalke 04, y visitó el Santiago Bernabéu para recibir un homenaje a su figura por parte del Real Madrid.