Leo Messi cada vez tiene más motivos para no querer regresar al Barça, una opción que se estuvo comentando después de que su club, el Inter de Miami, no pudiera clasificarse a los ‘play off’ de la Major League Soccer, que le impedirán pelear por el título. Es decir, que no volverán a disputar ningún partido oficial hasta finales del mes de febrero. Y de eso quería aprovecharse Joan Laporta para conseguir llegar a un acuerdo para su cesión hasta final de curso.
Sería un sueño cumplido para la afición, que aún anhela el retorno del hijo pródigo, y para Xavi Hernández, que nunca ha ocultado que estaría encantado de poder tener al mejor jugador de todos los tiempos a sus órdenes. Pero el actual entrenador del astro argentino, su compatriota Gerardo ‘el Tata’ Martino, que precisamente ya lo dirigió durante un año en el Camp Nou, aseguró rotundamente que era una posibilidad que no contemplaban.
Además, la relación entre el ocho veces ganador del Balón de Oro y el presidente azulgrana sigue siendo muy tensa. Y por si eso no fuera suficiente, David Beckham ha cerrado una incorporación que alegrará enormemente al delantero de 36 años, que nuevamente podrá compartir vestuario con uno de sus amigos. Por si no estuviera satisfecho con tener a Sergio Busquets y a Jordi Alba a su lado, a ellos ahora se sumará un nuevo nombre.
Y no puede ser otro que el de Luis Suárez. Ya intentaron ficharlo en verano, e hicieron todo lo posible para sacarlo de Gremio de Porto Alegre. No obstante, el conjunto brasileño se negó rotundamente a abrir las puertas de salida a su gran estrella, que se había incorporado solamente unos meses antes, procedente de Nacional de Montevideo. Así que le obligaron a respetar el contrato que tenía firmado, que expirará el 31 de diciembre.
De modo que pasará a ser agente libre en enero, y el combinado estadounidense ya tiene un acuerdo cerrado con el goleador uruguayo para que se traslade a la MLS con Messi.
Suárez firmará hasta 2025
Suárez tiene todo pactado con Beckham, y se comprometerá con el Inter de Miami hasta diciembre de 2025, es decir, el mismo año en el cual Messi, Busquets y Alba finalizan sus respectivos documentos de trabajo.
¿Será la última aventura que vivirán antes de decidir colgar las botas definitivamente?