El Teatro Châtelet de París acogió ayer la gala más importante del fútbol. El Balón de Oro fue entregado designando como reina y rey del fútbol a Alexia Putellas y a Karim Benzema, respectivamente, aparte de galardonar también a Gavi como el mejor futbolista sub-21 de la pasada temporada, a Robert Lewandowski como el mejor goleador, a Thibaut Courtois como el mejor portero o al Manchester City de Pep Guardiola como el mejor club del año.
Lunes por la noche en París, la fecha en que Joan Laporta esperaba ver a Leo Messi
A la cita acudieron grandes personalidades del entorno del fútbol de élite. Desde las leyendas que presentaban la velada como Didier Drogba, hasta otros nominados como Kylian Mbappé o Kevin de Bruyne. Sea como sea, Leo Messi, a quien se esperaba por el simple hecho de ser el futbolista que más veces ha recibido el máximo galardón individual, no hizo acto de presencia por primera vez desde el año 2006.
Y es que este año, es precisamente el primero en los últimos 15 en que France Football no le incluye entre los 30 finalistas para recibir el balón dorado. No obstante, no solo se esperaba que el astro argentino apareciera por su innegable legado, sino porque el pasado viernes, Joan Laporta afirmó en sus declaraciones para Barça TV que esperaba ver a Leo durante la noche del lunes en París.
Joan Laporta y Leo Messi, una deuda por saldar
El máximo mandatario blaugrana, sin embargo, recibió calabazas de parte de un Messi que empieza a recuperar su nivel de extraterrestre en el Parque de los Príncipes. A juzgar por su rendimiento y por el hecho de que se hayan desvanecido las numerosas críticas que recibió durante la última temporada, el '30' del Paris Saint-Germain atraviesa una etapa de estabilidad en su nueva vida en Francia y el hecho de que haya hecho uno nuevo feo a Joan Laporta certifica que no es el primer interesado en reunirse de nuevo con sus excompañeros en el FC Barcelona.
Sin embargo, y tal como ha manifestado en varias ocasiones el presidente culé, se siente con una "deuda personal" con Leo Messi, ya que su salida de la capital catalana no estuvo a la altura tratándose del mejor jugador de la historia del club.
Así pues, y aunque el presidente confirmó que se haría "algún reconocimiento en privado" al legado del actual jugador del PSG en can Barça después de que este domingo se cumplieran 18 años de su debut con la camiseta blaugrana, lo tendrá que planificar con el propio Messi en otra ocasión, ya que por París no se le vio a pesar de jugar en el equipo de la ciudad.