Messi responde a Bartomeu y lo hace de la forma más dura. El argentino ya ha comunicado al FC Barcelona que finalmente no se presentará a las pruebas PCR previstas para mañana y que, por consecuencia, tampoco asistirá al entreno del lunes. De esta forma, el de Rosario mueve ficha ante las últimas actuaciones de Bartomeu y no da opción a la esperanza: Messi quiere marcharse.
Tal como ha adelantado Rac 1, el todavía capitán blaugrana ha trasladado su intención de, finalmente, no ponerse bajo las órdenes de Ronald Koeman. Se había especulado que posiblemente Messi fuera al entreno para poder evitar represalias legales por parte del club, pero si en algún momento había pensado eso, los últimos movimientos de Bartomeu lo han hecho cambiar de opinión.
Messi no quiere más fotografías como jugador del Barça, ni con la camiseta de entrenamiento. Horas después de intentar ponerse en contacto con el club con el fin de intentar pactar una salida amistosa y lo menos traumática posible, Messi se ha cansado de ser ignorado por el club y ha tomado una decisión más drástica.