El Girona fue humillado por el Barça, un rival al cual pudieron vencer en los dos partidos que disputaron la pasada campaña. Y esto demuestra el gran trabajo que está haciendo Hans-Dieter Flick en comparación a Xavi Hernández, y también el notable declive que han experimentado los de Michel Sánchez, que han perdido a sus grandes estrellas durante el verano, como Aleix García, Savio Moreira, Eric García, Yan Couto o Artem Dovbyk.
Una cosa que era previsible, pero aún y así Quique Cárcel no ha podido reemplazar a todos estos cracks de la manera que esperaba. Los nuevos fichajes no están funcionando, y casi todos están teniendo un papel completamente residual, como son los casos de Bojan Miovski, Yáser Asprilla, Donny Van de Beek, Gabriel Misehouy o Ladislav Kjreci. Y los futbolistas que son titulares tampoco están cumpliendo con las exigencias. Entre los señalados encontramos a tres piezas, empezando por David López.
No está teniendo un inicio de curso sencillo, y cometió un error grave que propició el gol de Lamine Yamal. Ahora mismo está muy lejos del nivel que demostró en la pasada campaña, y puede ver como su condición de titular indiscutible en Montilivi corre peligro. A sus 34 años, comienzan a sospechar que ha entrado en la fase final de su carrera, y aunque es muy valorado por la experiencia que ofrece, y su jerarquía en el vestuario, quizás ha llegado el momento de pensar en su sucesión.
Y quien tampoco está destacando es Paulo Gazzaniga. El pasado año consiguió reivindicarse y realizó una serie de actuaciones muy destacadas, salvando al Girona en más de un partido. Pero como mucha gente advertía, es un portero excesivamente irregular, y capaz de lo mejor y de lo peor, propenso a equivocarse, en especial a la hora de salir con el balón controlado. Michel demostró su confianza a la hora de no fichar a otro guardameta, y puede pagar caro este error.
De momento, el argentino no está ayudando al equipo, y en enero puede perder su puesto, y dejar espacio a la llegada de otro portero que aporte más seguridad bajo los palos.
Abel Ruiz, en el punto de mira
Tampoco se salva de las críticas Abel Ruiz, que tenía una misión muy complicada, como era hacer olvidar a Dovbyk, que consiguió el Trofeo Pichichi en su primer y único año en la disciplina del Girona.
Por ahora el ex del Sporting de Braga, del Valencia y del Barça no está funcionando, e incluso Christian Stuani se ha mostrado mucho más acertado de cara a portería. Michel puede meter en la nevera a al internacional español, y también a Gazzaniga y David López.