Joan Laporta lo tiene muy claro: en la guerra es mucho mejor tener aliados que enemigos. Por eso, siempre ha trabajado en crear una buena relación con todos los agentes, y ese es el motivo que explica su amistad con Jorge Mendes. Eso le ha sido de gran ayuda, en especial, para conseguir la renovación de Anssumane Fati, anunciada hace unos meses, y espera tener el mismo éxito con Nico González. Pero, sin saberlo, eso le ha creado un problema grave al Barça.
Porque a Mino Raiola no le ha hecho ni pizca de gracia ver como el presidente culé se ha alejado de él, para acercarse al representante portugués, uno de sus grandes enemigos. Así que no lo ha dudado dos veces, y ha amenazado con alejar a varios de sus clientes del Camp Nou, en caso de que no corte de raíz todos los contactos con el magnate luso. Una cosa que sería traumática para los intereses de la entidad azulgrana, pues tendría consecuencias graves.
En especial, en el fichaje de uno de los grandes objetivos veraniegos, Erling Braut Haaland. Una de las bazas que tenían los culés para acabar llevándose la subasta por el delantero del Borussia Dortmund era la amistad que une al italiano y a Laporta. Pero eso ahora mismo estaría en duda, después de ver el lío de celos que se ha destapado por culpa de Mendes. Así que el astro noruego estaría un poco más lejos de aterrizar en la ciudad condal.
A menos que la situación cambie, parece muy complicado que Haaland acabe recalando en el Barça, lo que da ventaja al Manchester City y al Real Madrid, los otros dos grandes pretendientes que tiene. Xavi Hernández, por el momento, se mantiene distante, y no quiere pronunciarse sobre el tema. Lo deja todo en manos de la directiva, y ya ha hecho saber que para él, la contratación del ganador del Golden Boy de 2020 no es ninguna obsesión.
Obviamente, estaría encantado de tenerlo en su plantilla, pero en caso de que no acabe aterrizando, tampoco supondrá ningún problema. Es decir, que advierte que no quiere que se haga ninguna locura.
Pierre-Emerick Aubameyang apaga el incendio que había
Gran parte de culpa de que en el Barça ya no están desesperados por Haaland la tiene Pierre-Emerick Aubameyang. Desde que llegó, ha mostrado un nivel sensacional, marcando muchos goles, y acabando con los problemas de cara a puerta que arrastraban en los primeros meses del curso.
En caso de que no llegue otro goleador, para Xavi no supone ningún problema tener que seguir confiando en el internacional gabonés, que ha hecho méritos para seguir siendo titular indiscutible.