Luka Modric es una de las grandes razones por las que el Real Madrid sigue agrandando su palmarés año tras año. Que el croata siga llevando la manija del centro del campo madridista es garantía de éxito, y sigue demostrando que los 35 millones de euros que Florentino Pérez pagó al Tottenham el verano de 2012 han sido una auténtica ganga. Una década más tarde, y con 37 años, su nivel sigue siendo altísimo y el club blanco ya trabaja en su renovación por una temporada más, lo que acerca a Modric a retirarse como merengue.
Villas-Boas quiso fichar a Luka Modric para el Chelsea
Pero todo pudo haber sido muy distinto porque hubo otro club que estuvo cerca de fichar al mago de Zadar en 2011, un año antes de que llegara al Real Madrid. Se trata del Chelsea, que tras acabar la temporada 2010/11 estaba en busca de refuerzos para la sala de máquinas. Primero, tuvieron un cambio en el banquillo. Carlo Ancelotti fue apartado del equipo a final de esa temporada para dar entrada al portugués André Villas-Boas, que había brillado en el Porto siendo un entrenador muy joven.
Con la llegada del entrenador luso se buscaba un centrocampista que pudiera jugar al lado de Frank Lampard y por delante de jugadores más físicos como Essien, Obi-Mikel o el brasileño Ramires, y el club blue fue con todo a por Luka Modric. Así lo ha explicado el mismo Villas-Boas, sin equipo desde febrero de 2021, en una entrevista con The Telegraph.
El Chelsea acabó ganando la Champions con Meireles y Juan Mata
"Se nos escapó el acuerdo con Modric al principio de la temporada. Pensé que teníamos el acuerdo con Modric hecho y terminó en el Real Madrid la temporada siguiente," lamenta el exentrenador de Tottenham o Marsella. En una entrevista donde explica las disputas y los cambios de idea de Roman Abramovich o Marina Granovskaia, responsable deportiva del Chelsea hasta hace unos meses, admite que su idea era poder contar con Luka Modric para hacerlo el líder del centro del campo de Stamford Bridge.
Pero Modric se quedó un año más en el Tottenham antes de llegar al Real Madrid, donde se ha consolidado como uno de los mejores centrocampistas de las últimas décadas. Ese mismo verano, con el fichaje frustrado de Luka Modric, el Chelsea acabó fichando a Raul Meireles y al español Juan Mata, en un equipo que, muy sorprendentemente y ya sin Villas-Boas en el banquillo, ganaría la Champions League al final de esa temporada.