El mercado de fichajes siempre nos deja algún momento de locura. Ha pasado en todas las oficinas de todos los equipos del mundo, que han echado humo hasta el cierre del periodo de traspasos estival, ultimando los detalles para acabar de perfilar sus plantillas. El Sevilla es uno de esos equipos que se encuentra en un momento de transición muy complicado, con serios problemas económicos y con una plantilla debilitada, además de sufrir un cambio de director deportivo, con Monchi fuera del Sánchez Pizjuán para dar entrada a un Victor Orta con una papeleta muy complicada.
Precisamente, la salida del, ya, exdirector deportivo del conjunto de Nervión, provocó un terremoto en el seno del equipo andaluz, con declaraciones subidas de tonos y cruces de palabras, entre Monchi, y Pepe Castro, presidente del Sevilla. El adiós de uno de los grandes artífices de los mejores Sevilla que se recuerda, salió por la puerta de atrás, para embarcarse en un nuevo proyecto en el Aston Villa de Unai Emery, que promete mucho.
Monchi se olvidó del Sevilla para reforzar al Betis
Con relación al mercado de fichajes, Monchi estuvo a punto de perpetrar una de las mayores traiciones que se recuerdan en la ciudad andaluza. Negoció con el Real Betis, el máximo rival del Sevilla, por un futbolista perteneciente a los villanos, en vez de favorecer su llegada a Nervión, para mejorar la plantilla de José Luis Mendilibar.
Philipe Coutinho era uno de los nombres que barajaba la dirección deportiva del Real Betis, encabezada por Ramón Planes, para reforzar la plantilla de un conjunto verdiblanco que tiene un alto nivel. El brasileño ha ido perdiendo protagonismo desde su marcha forzosa del Barça y en Heliópolis estaban convencidos de poder sacarle su mayor rendimiento.
Desde Qatar también se tanteó la operación, pero fue el Betis quien más cerca estuvo de llevarse el gato al agua, forzado por un Monchi que se olvidó del 'club de su vida'. El andaluz quiso desprenderse de un Coutinho que no cuenta para Emery, pero en vez de facilitar un acuerdo con un Sevilla muy necesitado, prefirió ofrecérselo al máximo rival.
Coutinho estuvo cerca del Betis
Sin embargo, la operación no llegó a producirse ante las altas pretensiones salariales de Coutinho, y la falta de entendimiento entre clubes. La única opción para el Betis era la llegada del brasileño a préstamo, con un Aston Villa que se hiciera con gran parte del sueldo de 8 millones que cobra el centrocampista. Una cesión que podría haber significado una auténtica bomba, pero que no llegó a producirse.