José Mourinho puede convertirse en un aliado inesperado para el Barça, y hacer un favor enorme a Xavi Hernández llevándose a un jugador que no tiene espacio en la plantilla. Porque el entrenador catalán ha dejado claro en todo momento a Memphis Depay que no cuenta con él, y así se pudo comprobar en la pasada temporada, en la cual tuvo un papel claramente secundario, y se tuvo que conformar con ser suplente de manera habitual.
Pese a ello, el atacante de 28 años no quiso ni oír hablar sobre la posibilidad de salir del Camp Nou. Es cierto que tuvo ofertas para ello, y algunas de ellas realmente interesantes, pero ninguna fue capaz de hacerle cambiar de opinión. Estaba convencido de que podía ser una pieza útil, y que acabaría teniendo minutos. Sin embargo, ya se ha percatado de que no tomó una buena decisión, y ya comienza a estar arrepentido.
Es cierto que ha tenido problemas físicos, que le han hecho perderse algunos partidos, pero aún y así el papel del ‘14’ está siendo claramente testimonial. Es la última alternativa en la parcela ofensiva, y uno de los candidatos a marcharse del club. Joan Laporta y Mateu Alemany no tienen intención de ofrecerle la renovación, y de hecho, intentarán colocar al ex del Manchester United, el PSV Eindhoven y el Olympique de Lyon en el mercado invernal.
De este modo, evitarían que Memphis se marchara sin dejar ni un solo euro en las arcas, y confían en obtener una pequeña compensación económica. Ahora solo queda que llegue una propuesta que satisfaga las pretensiones del Barça, y por supuesto también las de Depay. Y aquí es donde entra en juego la AS Roma, que se ha interesado muy seriamente en su incorporación, y ya estarían en conversaciones para cerrar un acuerdo.
José Mourinho garantiza al internacional ser una de sus estrellas, y en Italia afirman que las posturas estarían muy cercanas, así que en enero puede acabar de certificarse este movimiento.
Xavi deja vía libre a Memphis
Para Xavi, la posible pérdida de Memphis no supone ningún tipo de problema, y no hará absolutamente nada por evitarla. De hecho, aunque no llegue nadie, aconseja a Laporta y a Alemany deshacerse de un futbolista que no considera necesario, y que ayudaría a reducir la masa salarial.
Ni siquiera reclamará la llegada de un sustituto que llene su vacío en el Barça, y se conforma con lo que ya tiene en la plantilla, y con las jóvenes promesas que hay actualmente en el filial y en el Juvenil A.