José Mourinho parecía que podía convertirse en la gran salvación del Barça, y reclutar a un jugador que se ha convertido en un problema mayúsculo para Hans-Dieter Flick, y en un dolor de cabeza terrible para Joan Laporta y para Deco. Porque uno de los focos de conflicto que existen en la plantilla es Anssumane Fati, al cual quieren dar salida lo antes posible, ya que percibe una ficha realmente elevada, y que no está justificando, de unos 12 ‘kilos’ brutos al año.
Comenzó la temporada en el punto de mira, y ya existían muchas dudas con él. Si el optimismo ya era moderado en ese momento, ahora ha pasado a ser totalmente inexistente debido a sus constantes lesiones y a las discretas actuaciones que ha realizado cuando ha estado en el terreno de juego. Y, por lo tanto, ya no existe la esperanza de que algún día pueda recuperar su mejor versión, y explotar el potencial que atesora.
Las constantes lesiones que le han perseguido han acabado por lastrar su carrera, y en el Camp Nou tienen decidido que lo mejor para todos es que abandone el vestuario. Durante el mes de enero hicieron todo lo posible, pero no llegaron propuestas, y el interés que existe por la contratación del ex del Sevilla y del Brighton & Hove Albion es mínimo. Una cosa totalmente lógica, viendo las pocas oportunidades que ha tenido a las órdenes de ‘Hansi’.
De hecho, se ha quedado fuera de las últimas convocatorias, una medida para presionarle y que decida irse del Barça, a pesar de que Ansu ha dejado claro que su intención es quedarse y cumplir el contrato que tiene firmado, hasta 2027, y tratar de convencer a Flick para que cambie de opinión. Por suerte para Laporta y para Deco, el Fenerbahçe parecía estar dispuesto a apostar por él, y a realizar una propuesta en firme para llevárselo.
Mourinho ya probó suerte en el último verano, aunque la oferta que presentaron los turcos, de unos 15 millones de euros, fue rechazada al instante.
Mourinho ya no tiene interés en Fati
Sin embargo, la realidad es que en Estambul se han olvidado de Ansu, y ya no tienen la intención de realizar una nueva ofensiva, a pesar de que el Barça ahora sí que estaría dispuesto a permitir la salida del ‘10’ por esa cantidad.
Mourinho ya no quiere saber nada de Fati, y no perdona que Laporta y Deco rechazaran la oferta que presentaron en su momento.